La reforma de la Rambla, unas obras de segunda para el Ayuntamiento

El Ayuntamiento de Barcelona invertirá en la conexión del tranvía por la Diagonal unos 56 millones de euros en menos de dos años, hasta finales de 2023. También en menos de un año, entre junio de 2022 y el primer trimestre del próximo año, la superilla del Eixample recibirá una inyección de 52,7 millones de euros, y a la remodelación de vía Laietana se destinarán 32,9 millones en unos dos años para pacificar una arteria en dos fases de obras que se harán consecutivas.

Mientras el consistorio pone toda la maquinaría en que los citados proyectos salgan adelante, otros, como la reforma de la Rambla, reciben la propina. Durante este 2022, la esperada transformación del paseo más internacional de la ciudad, solo dispondrá de unos tres millones de euros para iniciar unos trabajos, que acumulan más de 2.000 días de retraso, en el ámbito del monumento a Colón y de Santa Madrona. Las cuentas de los días que se llevan sin iniciar las obras son desde que se aprobó el plan de ordenación de la Rambla, en el pleno de mayo de 2016.

Render de la futura Rambla a la altura de Colón / AUNTAMIENTO DE BARCELONA

OBRAS DE "MÍNIMOS"

"Parece que hacen las obras porque las tienen que hacer", dice bastante decepcionado el presidente de Amics de la Rambla, Fermín Villar, una entidad que aglutina a vecinos, comerciantes y amigos del paseo. En diciembre, la misma entidad calificó las actuaciones previstas para 2022 como de "mínimos" y las comparó con la película de Luis García Berlanga, Bienvenido Mister Marshall por aquello del visto y no visto. En el filme, un pueblo castellano, Villar del Río, se prepara para recibir a unos diplomáticos norteamericanos con el objetivo de salir beneficiados por el Plan Marshall. Sin embargo, el día de marras, la caravana yanqui pasa de largo del pueblo

El pasado 28 de febrero, Barcelona de Infraestructures Municipals (BIMSA), la empresa que ejecuta la mayor parte de las obras públicas del Ayuntamiento, licitó los trabajos de urbanización del ámbito de Colom-Santa Madrona por valor de 9,6 millones IVA incluido [ver aquí la licitación]. Fuentes municipales explican que el presupuesto total en esta parte de la Rambla será de unos 11 millones y tres de ellos son para este año. Otros siete se invertirán en 2023 y uno más en 2024, dijo el concejal de Presupuestos Jordi Martí en diciembre.

AMICS DE LA RAMBLA TEME SIETE AÑOS DE OBRAS

Villar, de Amics de la Rambla, afirma que el Ayuntamiento le ha dicho que las obras no empezarán hasta después del verano. La licitación de BIMSA prevé un año y medio de trabajo para esta primera fase de remodelación de la Rambla, es decir que en el mejor de los casos no acabará hasta principios de 2024. "Posteriormente quedarán por ejecutar otras cuatro fases más, desde Drassanes hasta la plaza de Catalunya. Tememos que las actuaciones se prolongarán unos siete años". Una barbaridad. Desde el Ayuntamiento no han concretado ninguna fecha para el inicio de las obras de este año.

Fermin Villar, presidente de Amics de la Rambla / EUROPA PRESS

ZONA DE ESTANCIA JUNTO A LA COMANDANCIA NAVAL

Los primeros cambios se verán por debajo del centro Arts Santa Mònica. Está previsto que se modifique el trazado de la avenida de las Drassanes para facilitar la llegada al litoral. La idea es crear un nuevo espacio urbano con más vegetación, árboles y un nuevo pavimento hasta el monumento de Colón [ver aquí la nota de prensa].

El dibujo de la Rambla, elaborado por el equipo Km 0, que dirigió la arquitecta y exconcejal de Ciutat Vella Itziar González, hace más de dos años que está terminado. A grandes rasgos, el proyecto de la Rambla, con un presupuesto total de 44,5 millones, prevé construir tres grandes plazas a la altura del Pla del Teatre, el Pla de la Boqueria y el Pla de l'Espai Moja-Betlem. Las tres plazas serán de plataforma única para mejorar la conexión entre el Raval y el Gòtic.

Vista aérea de la Rambla / AYUNTAMIENTO DE BARCELONA

EL PASEO SE CERRARÁ A LOS COCHES PRIVADOS

Una vez terminada la reforma, la Rambla cerrará el tráfico a los coches privados. Solo podrán pasar los vecinos, los vehículos de servicios, el transporte público y las bicicletas. El paseo ganará, en algunos puntos, hasta 1,5 metros de ancho. La vía tendrá un único carril de circulación -es decir, uno de bajada y otro de subida- con una amplitud de 3,5 metros.