Familias de Sants, en pie de guerra: sin plazas en la escuela pública

La historia se repite año tras año. A finales de mayo, madres y padres molestos denuncian que se han quedado sin plaza en la escuela pública que habían elegido. Tras publicarse las listas de admitidos en preescolar y en los colegios del distrito de Sants-Montjuïc, muchas familias ven que no podrán llevar a sus hijos a los colegios públicos de su barrio. Como alternativa les ofrecen centros concertados, aunque no son asequibles para todos. Para denunciar la situación, los padres y madres del distrito barcelonés han decidido movilizarse bajo la asociación Sense Plaça a la Pública para presionar al Consorci d'Educació de Barcelona para ampliar la oferta y dar respuesta a todos los alumnos.

Isabel, representante de la plataforma de familias afectadas, lamenta a Metrópoli que la mitad de los niños está excluido de la oferta pública. En concreto, en un comunicado enviado al Consorci, los padres y madres denuncian que de las 634 plazas ofertadas, un 51% corresponden a escuelas concertadas y el 49% restante a plazas públicas. La demanda de plazas supera los 590 niños, por lo que muchos se ven obligados a abandonar su barrio para ir a otro colegio o escolarizarse en uno religioso, teniendo en cuenta que muchas familias son laicas. "Desde la asociación reclamamos que se garanticen el 100% de plazas públicas", afirma Isabel a este digital. Para las familias, esto se traduce como un "trato de favor" a la educación concertada.

UNA 'GINCANA' PARA CONSEGUIR PLAZA

Las familias no solo piden más plazas públicas, sino también el cambio de método por el cual se asignan. Actualmente, el sistema de escolarización pública se establece mediante un sorteo, que no garantiza una plaza pública para todos. "Las familias que optan por la pública se ven en una especie de gincana donde se sortea la plaza, porque la demanda siempre supera la oferta", explica la representante, que añade que los padres y madres deben escoger otras alternativas. Estas pasan por llevar a sus hijos a otro distrito o, las familias que se lo pueden permitir, pagar una concertada (entre 200 y 300 euros al mes).

El colegio Jaume I / JAUME I

GRUPOS SETAS Y RATIOS

Por culpa de este sorteo, más de 70 familias se quedaron sin su primera opción de escuela. Para solucionarlo, el Consorci creó lo que se denominan como grupos setas para hacer frente a la demanda. Se trata de grupos adicionales de alumnos que se añaden a otros grupos ya existentes. Esta medida se ha implantado en la Escola Jaume I, pero lo único que se consigue es "degradar todavía más el proyecto educativo y las condiciones de los niños", denuncian las familias. No ofrecen más plazas públicas y como solución proponen esta "nefasta solución", que reduce todavía más los espacios y recursos disponibles, que se deben de repartir entre los alumnos con los que ya contaba el centro escolar más el nuevo grupo 'seta'.

Otra de las denuncias de Sense Plaça a la Pública es el aumento de la ratio. En Catalunya se sitúa en 20 alumnos por profesor. No obstante, para poder absorber las demandas de la red pública en Sants-Montjuïc, se está estudiando subir la ratio hasta 24 alumnos por profesor.

SIN APOYO DEL AYUNTAMIENTO

Las familias lamentan que no reciben apoyo por parte de la sede del Ayuntamiento en Sants-Montjuïc, a cargo del concejal en funciones Marc Serra. Tal y como explican a Metrópoli, se reunieron en marzo con el consejo escolar del distrito para presentar sus demandas. No obstante, critican que "no han recibido ninguna respuesta". Por esta razón, han organizado protestas ante la sede, a la que se suma la organizada el pasado 1 de junio ante el Consorci d'Educació de Barcelona. Tras la reunión, el Consorci ha señalado a Metrópoli que se ha producido una modificación de la oferta de preescolar, por lo que todas las familias tendrán una asignación en uno de los centros demandados en la primera o segunda vuelta de la preinscripción.