Agentes de los Mossos d'Esquadra en una imagen de archivo / EUROPA PRESS

Agentes de los Mossos d'Esquadra en una imagen de archivo / EUROPA PRESS

El pulso de la ciudad

Empieza el desalojo de dos 'okupas' ucranianas en el piso de una mujer rusa en Sant Adrià

Intentaron desalojarlas hace unos meses, pero no lo consiguieron por la fuerte presencia de activistas

10 noviembre, 2022 09:08

Noticias relacionadas

El desahucio de dos mujeres ucranianas que ocupan un piso propiedad de una mujer rusa en Sant Adrià de Besòs y que aseguran que son refugiadas está previsto para este jueves por la mañana.

El mes de febrero intentaron desokuparlo, pero no pudieron por la fuerte oposición de activistas antidesahucios. El desahucio trató de llevarse a cabo sin que el juzgado reclamara la presencia de orden público, y tras el fracaso, lo volvió a reprogramar para hoy jueves, esta vez con la presencia policial adecuada.

CONFLICTO ENTRE LA PROPIETARIA Y LAS INQUILINAS

Según ha avanzado este miércoles La Vanguardia, la disputa está entre una propietaria rusa y una madre y su hija ucranianas, a las que la mujer les alquiló el piso en 2020 pero que rápidamente dejaron de pagar el alquiler, en un caso con versiones cruzadas.

La propietaria rusa ha denunciado que está estigmatizada por su origen desde que comenzó la guerra y ha acusado a las habitantes del piso de mentir para conseguir un certificado de refugiadas.

Un coche de Mossos y de Policía Local en Sant Adrià / AJUNTAMENT DE SANT ADRIÀ

Un coche de Mossos y de Policía Local en Sant Adrià / AJUNTAMENT DE SANT ADRIÀ

SIN CONTRATO DE ALQUILER

La rusa ha explicado que al poco tiempo de alquilarles el piso, con las que no firmó contrato de alquiler, empezaron a surgir divergencias, puesto que las inquilinas alegaron que habían sido engañadas porque había más personas viviendo en el domicilio, pese a que era algo que, según la propietaria, ya estaba hablado.

La otra versión señala que las dos mujeres huyeron de Ucrania por la guerra de Crimea y se establecieron en Sant Adrià de Besòs, según La Vanguardia, y estarían sometidas en la actualidad a un supuesto acoso por parte la propietaria rusa.

CORTES DE LUZ Y AMENAZAS

Las dos ucranianas incluso han denunciado en las redes sociales que han recibido amenazas y sufren cortes de luz. Las dos okupas del piso aprovecharon la directiva de la Unión Europea que permitía solicitar asilo a los ciudadanos ucranianos para alegar que el conflicto les había cogido fuera de su país y que no podían regresar, según ha explicado el citado medio.

Fuentes municipales aseguran que las dos mujeres ucranianas reciben atención de los servicios sociales.