Una protesta de las trabajadoras del servicio SARA / SARA

Una protesta de las trabajadoras del servicio SARA / SARA

El pulso de la ciudad

En huelga el servicio de atención a las víctimas de violencia machista de Barcelona

Las trabajadoras reclaman más personal para poder ofrecer un servicio de calidad a las afectadas

13 febrero, 2023 14:54

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La asamblea del Servei d'Atenció, Recuperació i Acollida (SARA), que atiende a las víctimas de violencia machista de Barcelona, ha convocado una huelga para el próximo 23 de febrero. Las trabajadoras reclaman más personal para poder ofrecer un mejor servicio a las víctimas.

Después de meses de manifestar la necesidad de ampliar los recursos humanos y materiales, las trabajadoras del SARA convocan huelga ante la falta de respuestas por parte de la administración pública.

AMPLIAR LOS RECURSOS HUMANOS Y MATERIALES

La asamblea ya había comunicado a la gerencia y a las direcciones del Instituto Municipal de Servicios Sociales la necesidad de ampliar la plantilla y los recursos para poder ofrecer una atención de calidad. 

Las trabajadoras lamentan no haber obtenido ninguna propuesta sobre sus reivindicaciones. En 2020 el servicio ya protestó por sus condiciones laborales.

SOBRECARGA DE TRABAJO

Además, denuncian falta de plantilla y sobrecarga de trabajo. Las trabajadoras aseguran que la situación esta provocando estrés, trastornos de ansiedad y malestar psicosocial entre los empleados.

Manifestación contra la violencia machista en una imagen de archivo / EUROPA PRESS

Manifestación contra la violencia machista en una imagen de archivo / EUROPA PRESS

También reclaman que no se está cumpliendo la normativa que estipula que se tienen que destinar recursos suficientes para asegurar el derecho de las mujeres a vivir libre de violencia

INCUMPLIMIENTO DE LAS RATIOS

En un comunicado, las trabajadoras han asegurado que no se cumplen las ratios, que hay temporalidad en los contratos y falta de reconocimiento de la especialización. Denuncian que todo esto comporta largas listas de espera para las mujeres, que pueden alcanzar a los dos meses antes de la primera visita con a psicóloga.