La PAH carga contra la "insuficiente atención social" tras el suicidio de un desahuciado

El suicidio de un hombre tras ser desahuciado ayer de un piso de propiedad municipal en Barcelona pone en evidencia la falta de inversión en políticas sociales, según la Plataforma de Afectados por la Hipoteca (PAH). En un comunicado, la PAH se pregunta este martes cuáles han sido las causas que han obligado a esa persona a tomar una decisión tan drástica y han apuntado a que "el sistema de protección social ha fallado".

Añaden que, según las informaciones ofrecidas por el Ayuntamiento de Barcelona, esta persona no dispuso en los últimos tres años "del acompañamiento adecuado a su situación, hecho por el cual en el momento en que ha perdido la vivienda, su único refugio, no ha visto ninguna otra alternativa a quitarse la vida", ha considerado la PAH.

CASUÍSTICAS COMPLEJAS

"Nuestra experiencia en atender a personas con problemas habitacionales nos demuestra que la atención social por parte de las diferentes administraciones es insuficiente", ha advertido la Plataforma.

Las entidades sociales, aseguran, "hemos reiterado una y otra vez a las diferentes administraciones que los diferentes protocolos que se aprueban fallan a la hora de dar respuesta a aquellas casuísticas más complejas".

MÁS VÍCTIMAS

La PAH ha recordado que no es la primera vez que se suicida una persona que iba a ser desahuciada en Barcelona y que el año pasado un vecino del barrio de Sants decidió precipitarse desde su balcón cuando la comitiva judicial se dirigía a ejecutar el desahucio, "a pesar de la intervención de los servicios sociales y la acreditación de vulnerabilidad".

Hace pocos días, dos mujeres mayores y hermanas, se quitaron también la vida en Santander ante la perspectiva de perder su vivienda. Por todo ello, la PAH ha exigido al Ayuntamiento, a la Generalitat y al Gobierno "que centren sus esfuerzos en promover políticas en este sentido: prohibir los desahucios sin alternativa, aumentar el parque público de vivienda, invertir recursos en los servicios sociales y en la atención proactiva, integral y personalizada de los afectados y afectadas", entre otras medidas. "Garantizar el derecho a la vivienda quiere decir salvar vidas", ha argumentado la PAH.