El candidato de ERC, Ernest Maragall; el candidato del PSC, Jaume Collboni; la candidata de Barcelona en Comú, Ada Colau; el candidato de Junts, Xavier Trias / METRÓPOLI

El candidato de ERC, Ernest Maragall; el candidato del PSC, Jaume Collboni; la candidata de Barcelona en Comú, Ada Colau; el candidato de Junts, Xavier Trias / METRÓPOLI

Información municipal

Barcelona, ¿una nueva etapa tras Ada Colau?

La capital catalana se juega la continuidad de políticas municipales que se han adoptado de forma unilateral y la relación con el entorno metropolitano para hallar soluciones a retos compartidos

27 mayo, 2023 23:00

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La hora del voto. Con todas las papeletas distribuidas, y ya dentro de los colegios electorales, los barceloneses decidirán a lo largo de este domingo si abren o no una nueva etapa política en la ciudad, tras los dos mandatos de Ada Colau, que ha estado al frente de los comunes con la toma de decisiones de carácter unilateral, que han alterado en profundidad el urbanismo o la movilidad. En esos ocho años de gobierno municipal se han dejado pendientes, además, cuestiones como la falta de vivienda pública, que no deja de recibir una fuerte demanda por parte de varios colectivos.

Al margen de los acuerdos postelectorales que se puedan producir, lo que está en juego es si habrá o no un cambio al frente de la alcaldía, y qué relación se establecerá con el entorno metropolitano, con alcaldes, en su mayoría, del PSC y que reclaman una mayor coordinación y políticas comunes en materia de seguridad o de movilidad.

La campaña electoral ha entrado en todos esos temas, con mayor o menor fortuna por parte de todos los candidatos. Barcelona se ha ido recuperando de la parálisis económica y de cierta melancolía, y, tras la pandemia, se beneficia ahora del turismo internacional y de los eventos de todo tipo que llevan años organizándose, en especial los conciertos musicales de gran formato. Pero, ¿hay un modelo a medio y largo plazo que la administración local haya manifestado?

Esa cuestión ha estado de forma latente en los debates electorales. Sin embargo, lo que deciden este domingo los barceloneses –se prevé una participación entre el 55% y el 58%, en línea con la serie histórica de las votaciones locales en la ciudad—es un cambio en la alcaldía que pasa por dos nombres: o el socialista Jaume Collboni o el ex convergente Xavier Trias, candidato de Junts per Catalunya, una formación que todavía tiene como máximo referente al expresidente de la Generalitat Carles Puigdemont.

LAS OPCIONES DE TRIAS

El otro candidato en liza, el republicano Ernest Maragall, puede tener un papel importante, tras la noche electoral, pero ha quedado fuera del podio para optar a la alcaldía. Esa cuestión ha sido una constante en todas las encuestas electorales. Desde el momento en el que Xavier Trias anunció su candidatura a la alcaldía, --empujado por un entorno económico y por figuras convergentes como Artur Mas y respaldado por el propio Puigdemont para lograr la plataforma que supondría Barcelona—las opciones de Maragall fueron disminuyendo. Eso sucedió en enero de este año. Esquerra Republicana no quiso cambiar de candidato ni reorientar su estrategia en la ciudad, y ha visto cómo Trias se convertía en uno de los grandes referentes para alcanzar la alcaldía.

Lo sucedido desde entonces ha ido oscilando entre la voluntad de Trias de presentar la campaña como un duelo entre él mismo y Ada Colau, y el ascenso continuado de Jaume Collboni, beneficiado por su marca electoral, el PSC y el PSOE, que vive un momento de auge en Catalunya, con otra figura que tiene un papel relevante en las elecciones municipales: Salvador Illa, primer secretario del PSC.

Si se atiende a esa circunstancia, por tanto, o mantiene la alcaldía Ada Colau, o la alcanza Jaume Collboni o Xavier Trias. Pero para ello serán necesarios los acuerdos políticos, que comenzarán a cocinarse esta misma noche, cuando se sepan los resultados finales.

La continuidad de muchas de las políticas municipales, aunque con otro tono, y con prioridades distintas, podría manifestarse con la renovación del pacto entre los comunes y los socialistas, con Jaume Collboni de alcalde. El otro juego posible se construirá sobre un acuerdo entre el PSC y JxCat, aunque siempre en el caso de que Collboni quedara por delante de Trias.

COLAU, CON SUMAR

Pero el dirigente de JxCat tiene la posibilidad de ser alcalde con el apoyo de ERC, aunque se intuya complicado y farragoso, y, de hecho, poco estimado por las dos partes. En todo caso, siempre se necesitará un tercer elemento, un partido que pueda completar una mayoría de 21 concejales, la necesaria para elegir a un alcalde o alcaldesa.

Las elecciones municipales en Barcelona se enmarcan, sin embargo, en un conexto catalán y español. El PSC ha reivindicado su plena autonomía del PSOE para establecer los acuerdos que precise. En el caso de los comunes esa circunstancia todavía es más clara, porque es una de las confluencias de Unidas Podemos con mayor capacidad de maniobra, y que ya ha establecido su alianza con la vicepresidenta del Gobierno, Yolanda Díaz, la líder de Sumar, la fuerza política que quiere mantener un acuerdo con el PSOE para seguir en la Moncloa tras las próximas elecciones generales.

Los comunes de Ada Colau, con todo, han expresado que sólo desean gobernar en Barcelona a partir de un acuerdo progresista. Colau incluye en ese eje al PSC y a ERC. Pero no desdeña a la CUP, cuya dirección ha dado claros indicios de apostar por la actual alcaldesa. La cuestión es que la CUP podría no lograr la barrera del 5% para obtener representación. Sus votantes, en cambio, como reflejan las encuestas, sí están optando por un trasvase de voto a los comunes.

LA SUPERILLA DE CONSELL DE CENT

En la posibilidad de cambio en Barcelona se sitúan un partido fundamental: el PP que tiene como alcaldable a Daniel Sirera. Esa pieza podría ser fundamental para inclinar la alcaldía hacia Jaume Collboni o Xavier Trias. Y en la misma situación se encuentra Valents, el partido que tiene como alcaldable a Eva Parera, que ha surgido de una bifurcación de Ciudadanos, de su grupo municipal en Barcelona. Las encuestas no le han dado representación, pero todo dependerá de la participación de este domingo.

En los estatutos de los comunes se limitaba el mandato de Ada Colau a dos periodos electorales. Pero, en el último minuto se decidió que la actual alcaldesa optara a un tercer mandato. Lo que está en juego, por tanto, es si Colau dirá adiós tras ocho años, en los que ha polemizado con muchos colectivos, con decisiones unilaterales y con un cambio mayúsculo desde el punto de vista urbanístico, con el Eixample patas arriba y con la superilla de Consell de Cent como símbolo, para lo bueno y para lo malo.