Gala Pin con la alcaldesa Ada Colau

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Información municipal

Gala Pin protagoniza el primer escándalo de puertas giratorias en los comunes

La exconcejal de Ciutat Vella ha fichado recientemente por la Fundación Goteo, plataforma subvencionada por Colau

14 febrero, 2020 21:56

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Primer gran escándalo de Barcelona en Comú de puertas giratorias. ¿La protagonista? Gala Pin, concejal de Ciutat Vella durante el primer mandato de Ada Colau. Tal y como avanzó este medio, la exedil ha fichado recientemente por Goteo, una fundación que recibió diversas subvenciones durante el primer gobierno de los comunes mientras Pin ejercía de regidora. La partida más copiosa fue de 136.000 euros, aprobada por el Ejecutivo local en los acuerdos de gobierno de noviembre de 2017.

No obstante, el caso más flagrante y que relaciona a Gala Pin con Goteo fueron las subvenciones otorgadas a la fundación desde el Institut de Cultura de Barcelona (Icub). La exconcejal ocupó durante el pasado mandato el cargo de vicepresidenta del Icub. En el transcurso del mismo, el organismo público entregó al menos 23.056 euros a Goteo a través de subvenciones públicas. 

¿ILEGALIDAD?

El caso Pin, ejemplo de puertas giratorias, podría chocar con el régimen de incompatibilidades establecido por la legislación española. La ley 3/2015 reguladora del alto cargo de la Administración General del Estado asegura en su artículo 15 que "los altos cargos, durante los dos años siguientes a la fecha de su cese, no podrán prestar servicios en entidades privadas que hayan resultado afectadas por decisiones en las que hayan participado".

Fuentes jurídicas consultadas por este medio afirman que si el caso Pin no pudiera ser castigado por ley es gracias a la laxitud de la legislación española en esta materia. Tanto es así que Podemos registró en febrero de 2019 una proposición de ley para dificultar las puertas giratorias. Según justificó el partido hermano de Barcelona en Comú, la medida, que contemplaba penas de prisión para los casos más graves, era fundamental para "revertir la dinámica de corrupción del país" de los últimos años.

CÓDIGO ÉTICO

En el terreno de la política, Podemos y sus socios territoriales --como Barcelona en Comú-- han sido los más beligerantes contra las puertas giratorias. Ambos partidos han señalado indiscriminadamente a políticos de otras formaciones por dar el salto a grandes empresas tras haberlas favorecido durante su ejercicio público. En una entrevista, Ada Colau definió este fenómeno como "un gran déficit democrático". 

Tanto Podemos como Barcelona en Comú cuentan con códigos éticos internos que prohíben de forma expresa las puertas giratorias de los miembros de sus formaciones. En el caso del partido de Ada Colau, el punto 1.7 del código ético, dedicado a las incompatibilidades, recoge: “No acceder durante un periodo, mínimo de cinco años, a cargos de responsabilidad de empresas creadas, reguladas, supervisadas, o que hayan sido beneficiarias de un contrato municipal, dentro del ámbito y/o sector donde ha desarrollado su función representativa”. “En ningún caso se ocuparán cargos en los consejos de administración de estas empresas”, se remarca en el mismo documento.

Consultados por este medio, fuentes de Barcelona de Comú niegan que en el caso de Pin exista incompatibilidad con el código ético del partido porque "Goteo no ha tenido ningún contrato con las áreas de gobierno de Gala Pin". Las mismas fuentes recalcan que Pin no ocupa un cargo directivo en Goteo, sino "técnico", y que durante su etapa como desempleada rechazó varias ofetas de trabajo porque incumplían el código ético del partido.

LOS TRABAJOS DE GALA PIN

Mientras, Pin ocupa desde este mes de febrero su nuevo puesto como project manager en Goteo. La fundación tiene sus oficinas de Barcelona en Fabra i Coats, un recinto de titularidad pública adscrito al Icub. Según fuentes cercanas a los comunes, la exconcejal buscó acomodo en diferentes empresas como community manager, profesión que había ejercido con anterioridad. Durante su paso por el paro, Gala Pin realizó algunas colaboraciones para Crític, medio de comunicación digital próximo a los comunes.

Según informa en su perfil de Linkedin, el primer trabajo de Gala Pin fue de traductora, como freelance, entre 2005 y 2008. Entre 2006 y 2007 trabajó en el Observatori Desc y entre 2008 y 2012 lo hizo como community manager en XNet. También ejerció de community entre 2012 y 2014 en su regreso al Observatori Desc. Llevaba la cuenta de la PAH, donde alcanzó notoriedad Colau.