Jaume Collboni en un momento con los periodistas de Metrópoli Abierta / ESTHER TEJADA-COLECCIONISTAS DE MOMENTOS

Jaume Collboni en un momento con los periodistas de Metrópoli Abierta / ESTHER TEJADA-COLECCIONISTAS DE MOMENTOS

Información municipal

Collboni: "Colau ha decepcionado a mucha gente"

"En 2019, el independentismo hará la ofensiva final para intentar quedarse con la alcaldía de Barcelona", dice el líder socialista

17 diciembre, 2017 20:22

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Jaume Collboni (Barcelona, 1969) es concejal del Ayuntamiento de Barcelona desde mayo del 2015. El líder municipal del PSC ha vuelto recientemente a la oposición después de que se haya roto el pacto de gobierno con Ada Colau por el apoyo socialista a la aplicación del artículo 155 en Catalunya. Abogado y funcionario de la Admnistración Local, Collboni fue diputado en el Parlament entre 2010 y 2014. Ese año dejó el cargo para presentarse a las primarias del PSC, que ganó, para optar a la alcaldía de Barcelona. En las municipales del 2015 obtuvo cuatro regidores.

¿Por qué se rompió el pacto de gobierno?
Básicamente porque Colau priorizó sus intereses partidistas y políticos a los de la ciudad. Sufrimos el mismo acoso que todos los alcaldes socialistas de Catalunya por parte de las fuerzas independentistas, que fueron muy hostiles con el pacto. En Barcelona en Comú no aguantaron la presión e hicieron una cosa inédita en democracia como es convocar una consulta sin tener una posición pública propia en defensa del pacto. La colaboración se rompió por una cesión de los comunes al independentismo y porque no saben qué modelo de ciudad quieren. La aventura política superó la idea de ciudad y de cómo quieres gobernar.

¿Cuándo comenzaron las discrepancia y cuándo intuyó que se rompería el pacto?
Discrepancias hemos tenido muchas durante el año y medio del pacto. Somos partidos diferentes, con unas tradiciones políticas distintas. Compartimos unos principios, unas bases y una visión de la ciudad y, sinceramente, nunca pensé que el acuerdo se rompería por el proceso independentista porque el nuestro era un pacto blindado. La fuerza de nuestra alianza era aislar la gobernabilidad de la ciudad del contexto de la política catalana, pero el procés arrasa con todo. Siempre pensé que el pacto podía romperse pero no por este motivo.

"El problema de los 'comuns' es que no tienen una idea clara de qué ciudad quieren, ni del modelo de gobernabilidad para Barcelona"

¿Por qué Colau no defendió el pacto ante las bases de su partido?
Se lo tendría que preguntar a ella porque no hay precedentes de que un gobernante someta una decisión tan importante a sus bases y no explique su posición. Yo, por ejemplo, hice campaña a favor de la continuidad de nuestra alianza con el apoyo de mucha gente vinculada a Iniciativa y Esquerra Unida Alternativa. El problema de los comuns es que no tienen una idea clara de qué ciudad quieren, ni del modelo de gobernabilidad para Barcelona. Cuando tienes una idea clara, la defiendes incluso en un contexto hostil. El liderazgo político se reconoce y se ejerce en las condiciones adversas y Colau ha demostrado poco liderazgo.

¿Colau quería la Agencia Europea del Medicamento?
El gobierno de Barcelona (sonrisa) quería la Agencia Europea del Medicamento.

¿Por qué no defendió Colau la candidatura?
Hicimos un reparto de papeles. En Londres nos percatamos de que nos encontrábamos ante la gran oportunidad de la ciudad para atraer inversión. En Inglaterra todavía estaban desolados con el Brexit, conscientes de que dejarían de ser la sede de la agencia y empezamos a darle vueltas a la candidatura de Barcelona, contando con el apoyo del gobierno catalán y, sobre todo, del Estado, que sería quien defendería nuestra opción. El problema es que no todo el gobierno municipal era tan entusiasta como nosotros.

¿Qué ha supuesto para Barcelona la pérdida de la Agencia del Medicamento?
Por una parte, constatar que alguna cosa grave nos está pasando como ciudad y como país. Y a nivel económico, la pérdida de 4.000 puestos de trabajo directos cualificados y 14.000 indirectos, según CCOO. En el sector farmacéutico, de la medicina y la biomedicina lamentan la gran oportunidad que ha perdido Barcelona.

¿El Mobile peligra para Barcelona?
Sí. Peligra si no hay estabilidad política, y no solo en Barcelona, sino en Catalunya. El problema no son [John] Hoffman ni el Mobile, sino las multinacionales asiáticas que no entienden y no quieren saber nada de un país inmerso en una situación política tan inestable. Hoffman había apostado personalmente por Barcelona desde la época del alcalde Jordi Hereu, porque estaba acostumbrado a un gobierno de José Luis Rodríguez Zapatero en Madrid, José Montilla en Catalunya y Hereu en Barcelona, que estaban muy bien alineados y apostaban por el Mobile. Yo le dije que valía la pena apostar todavía por Barcelona porque la inestabilidad política se superaría en un año o año y medio.

Jaume Collboni, en la azotea del Ayuntamiento  / ESTHER TEJADA-COLECCIONISTAS DE MOMENTOS

Jaume Collboni, en la azotea del Ayuntamiento  / ESTHER TEJADA-COLECCIONISTAS DE MOMENTOS


¿Por qué Colau y sus concejales tienen tantas dudas respecto a los grandes eventos de Barcelona, como el Mobile o la Fórmula 1, entre otros?
He de decir, con humildad, que he aprendido cosas de ellos y también que les hemos convencido de cosas que se podían hacer en Barcelona de las que ellos tenían prejuicios. Ellos eran antisistema y en su día combatieron a los alcaldes socialistas, incluido Pasqual Maragall, a quien ahora reivindican. Criticaban la Barcelona olímpica, la que se proyectaba al mundo, como si fuera la antítesis de una Barcelona más próxima, la Barcelona de los barrios y los servicios de proximidad. El gran éxito de la ciudad fue juntar las dos cosas, que no son antagónicas sino complementarias. Barcelona se ha beneficiado de los grandes eventos para crecer como ciudad, desarrollarse y dar bienestar a ss ciudadanos. Éste es el modelo socialista.

¿Por qué fue tan fría la celebración del 25º aniversario de los Juegos Olímpicos?
Porque el éxito olímpico estuvo basado en la colaboración de las autoridades de Barcelona, Catalunya y España, cuestionada ahora por los independentistas. Hace 25 años, además, hubo movimientos radicales que contraponían la Barcelona de los JJOO con la Barcelona popular y de los barrios. El pasado julio gobernaba Barcelona quienes no defendieron en su día la idea de organizar unos Juegos y un gobierno político que niega que lo que es bueno para Barcelona también lo es para Catalunya y para España. Como partido y como grupo hicimos un sobreesfuerzo muy importante para que tuviera una mínima celebración.

¿Por qué Barcelona en Comú reivindica la figura de Pasqual Maragall?
Porque intentan reconciliarse con la mejor Barcelona. Muchas cosas que se han hecho y defendido desde Barcelona en Comú nunca las hubiera apoyado Maragall ni las hubiera hecho. Por ejemplo, los comunes son contrarios a los Juegos Olímpicos de invierno, una clara demostración de que ellos reivindican una figura pero no su obra. Maragall, además, nunca hubiera permitido un discurso antiturístico. Él fue el autor del primer plan de hoteles que tuvo Barcelona porque concibió que el progreso de la ciudad, en ausencia de un Estado, tenía que ir de la mano de los empresarios y el sector privado, es decir la famosa colaboración público-privada. Cuando se reivindica la figura de Maragall pero no su obra se está haciendo trampa.

"Cuando se reivindica la figura de Maragall pero no su obra se está haciendo trampa"

¿Los grandes agentes económicos de Barcelona tienen motivos para estar preocupados tras romperse el pacto de Gobierno?
Barcelona saldrá adelante a pesar de su gobierno. La clase empresarial y el tejido asociativo barcelonés son muy potentes y están acostumbrados a trabajar a favor de la ciudad. Algunos empresarios seguirán con sus planes, aunque no les acompañe el Ayuntamiento. En una coyuntura como la actual de caída del consumo, los empresarios del sector turístico harán su propia promoción si no cuentan con el respaldo del gobierno de Barcelona. Bajarán precios para aumentar el número de pernoctaciones, pero esta Barcelona no es la que interesa a todos los ciudadanos, sino solo al sector hotelero. Es mejor hacer la ciudad entre todos, con la colaboración de los sectores públicos y privados. No puede continuar esta hostilidad hacia el sector privado.

¿Qué tipo de oposición hará el PSC? 
Nuestra obligación democrática pasa por hacer una oposición para diferenciar los dos proyectos. Cuando entras en un gobierno de coalición cedes en algunas cosas y renuncias a una parte de tu identidad política, pero ahora somos 100% PSC y 100% Barcelona. Seremos coherentes con lo que hemos hecho y la nuestra será una oposición constructiva, apoyando todos los planes en los que hemos participado. Sin embargo, también nos posicionaremos en contra de lo que no estemos de acuerdo, como por ejemplo los presupuestos.

Ha puesto como condición la congelación de las tarifas del transporte público para negociar los presupuestos.
Mientras nosotros hemos estado en el gobierno no se han subido las tarifas del transporte público ni los impuestos. Los ciudadanos de Barcelona no deben pagar otra vez lo que no pagan el Estado y la Generalitat. Lo pagamos en impuestos y tarifas. Si fue posible rebajar los precios con Xavier Trias, como fue bajar el precio de la T-10 a menos de 10 euros, espero que sea posible congelar las tarifas con Colau. Esta es la condición que hemos puesto para negociar los presupuestos.

Queda un año y medio para las elecciones municipales, ¿ha tomado la decisión de presentarse?
El PSC tiene que hacer primarias. Son obligatorias, pero no he tomado ninguna decisión. Primero es una decisión personal. Me he cogido un tiempo. Siempre lo he hecho así. Dedicarse a la política es un sacrificio muy importante y primero quiero hacer una reflexión a nivel interno. Y después hay que hacer una reflexión desde un punto de vista colectivo. Siempre digo que a mi lo que me interesa es Barcelona. No me planteo hacer otra cosa que no sea política en Barcelona. Es una decisión que tenemos que tomar en el partido y todavía no se ha hecho. Se tiene que hacer la próxima primavera, dentro de cuatro meses.

¿Por qué cree que los comuns no han consultado a los vecinos proyectos tan importantes como las superillas o los carriles bici cuando hay tanta gente en contra?
Porque las perderían. Es obvio. Consultas, consultas, salvo la de las bases [para romper el pacto con el PSC] no hemos visto muchas más. Hay un déficit de participación, y lo digo también como autocrítica nuestra. Po ejemplo, con los presupuestos. Sobre todo los comuns llevaban en su programa que tenían que ser unos presupuestos participados por los barrios y los distritos. Había una parte que tenía que ser consultada. Y no solamente no se hace, sino que se baja la aportación a los distritos. Los distritos han perdido capacidad financiera. Hay un déficit de participación en este gobierno. Quiero recordar que la última consulta que hubo en esta ciudad fue la de la Diagonal y fue Jordi Hereu. No nos fue bien, pero se hizo lo que la gente pidió.

Dentro de unos años, ¿qué cree que quedará y qué trascenderá del gobierno de Ada Colau?
Trascenderá que fue fruto de un momento político muy concreto de este país y que mucha gente pensó que se podía haber producido un cambio en la política en general y en las políticas municipales en particular. ¿Qué quedará? No lo sé. Muchas cosas no han cambiado por decepción de muchos, entre los que me sumo. Pensé que podían cambiar la forma de hacer política. Nosotros facilitamos la investidura de Colau a cambio de nada. Y lo hicimos porque entendimos que la gente pedía eso. Ahora, creo que esta decepción la comparte mucha gente. Colau ha decepcionado a mucha gente.

Jaume Collboni, en su despacho municipal / ESTHER TEJADA-COLECCIONISTA DE MOMENTOS

Jaume Collboni, en su despacho municipal / ESTHER TEJADA-COLECCIONISTA DE MOMENTOS


¿Usted cree que Colau reeditará mandato?
Es un tema difícil de saber ahora. Lo que si creo es que el independentismo hará la ofensiva final en 2019. Ahora ha conseguido romper el gobierno de la ciudad. Colau ha cedido. Me espero una ofensiva final del independentismo para intentar quedarse con la alcaldía de Barcelona.

¿Sobre esta opa independentista, ve posible acabar el mandato con otro alcalde?
Lo veo muy difícil. Habrá acoso y derribo. Pero plantear una alternativa para antes de las elecciones no lo veo. No es realista. Creo que el independentismo tiene una espina clavada en Barcelona. Intentarán de todas todas generar una alternativa [para las municipales]. Para mi lo grave no es que sea independentista o no. Lo que me preocupa es que cada vez se habla menos de la ciudad y de sus problemas. Cuando se ha atacado al gobierno izquierdas de Barcelona ha sido por un tema que no era de la ciudad. Colau cayó en la trampa de romper el pacto de gobierno por un tema de fuera. Los temas de fuera se están acabando imponiendo sobre los temas de Barcelona. Por eso me preocupa la ofensiva independentista.

Uno de los temas importantes de la ciudad es la conexión del tranvía. ¿Cuál es el posicionamiento del PSC?
Siempre hemos estado a favor de la conexión del tranvía, desde los tiempos de Jordi Hereu.

¿Por la Diagonal?
La Diagonal es el punto más corto. Nosotros defendemos que es un proyecto que se tiene que despolitizar, sacarlo del ámbito de los partidos. Hay que estudiar cómo y por dónde hay que hacer la conexión. Hay que tener en cuenta todos los informes técnicos. No solamente unos. Y tener en cuenta los cambios que hay en la movilidad. Hay formas de moverse por la ciudad que hace cinco o 10 años eran impensables. No solamente la bici, sino los aparatos que ahora circulan. Todo esto obliga a replantear la movilidad de la ciudad. Y este contexto hay que ver cuál es el trayecto final del tranvía. Hay que plantearlo sin ideas fijas. Aquí de lo que se trata es que haya una movilidad eficiente, sostenible y lo más económica posible. 

¿No se concretará este mandato la conexión del tranvía?
No se ha trabajado. No se ha trabajado el consenso social ni el político. Una de las cosas que veremos al final del mandato es que no ha habido grandes pactos de ciudad. Es el mandato democrático en que el gobierno ha estado más en minoría y es el mandato en el que menos consensos se han producido. Ni siquiera los presupuestos. No se ha aprobado ni uno. Ni el Plan de Actuación Municipal. Nada. Lo que ha pasado este mandato no había pasado nunca.

¿El tema de Glòries será otro de los temas que quedará parado?
Espero que no. Barcelona no se lo merece. Espero que el gobierno busque todos los consensos necesarios dentro del Ayuntamiento para tirarlo para adelante. Nosotros no seremos un obstáculo.

"Ha quedado demostrado que es antieconómico y antisocial pensar que municipalizándolo todo las cosas funcionan mejor"

¿El PSC apoyará los procesos de remunicipalización de los comuns? ¿Puede haber consenso en esta cuestión?
La pregunta no es qué se tiene que remunicipalizar o no, sino cómo se presta un mejor servicio a los ciudadanos. La fórmula para nosotros es instrumental. ¿Un servicio público es más eficiente, sostenible o barato si se presta desde manos públicas o privadas? Depende. En cada caso, estudiémoslo. Ha quedado demostrado, históricamente, que es antieconómico y antisocial pensar que municipalizándolo todo las cosas funcionan mejor. No es verdad.

¿Algún ejemplo?
Nosotros tenemos empresas públicas, como es BSM, que es un ejemplo de empresa pública, en la que nadie se lucra, los trabajadores están bien pagados, tienen buenas condiciones de trabajo y se prestan servicios básicos en la ciudad de movilidad que no le cuestan un duro a la ciudad. La empresa genera sus propios beneficios. Y es una empresa pública. Esto se tiene que remunicipalizar, ¿por qué? El servicio de recogida de basuras también es un debate que está ahí. La pregunta es la misma, ¿Barcelona en Comú se plantea municipalizar el servicio cuando se presta un buen servicio y es eficiente y moderno? Si ha habido algún desvío que se persiga, pero conozco ayuntamientos donde el servicio es municipal y es un desastre. Hay que estudiar qué es mejor en cada caso.

¿Por qué no ha dimitido nadie de Cementiris de Barcelona por el derrumbe en Montjuïc del 15 de septiembre?
No ha habido un reconocimiento de la magnitud del problema. Las noticias han quedado muy diluidas. Hay que hacer una reflexión sobre el tema de los servicios funerarios en general. En muchos ámbitos no se ha prestado un buen servicio y los precios que paga la gente en esta ciudad por un servicio funerario son desorbitados. Y eso tiene que ver con la falta de competencia. Creo que para la ciudad es más barato introducir más competencia en el mercado que municipalizar el servicio. Se trata de dar un servicio de calidad a precios razonables.

Recientemente, la alcaldesa ha confesado que sufrió un intento de violación y ha salido en un programa de televisión confesando aspectos de su sexualidad. ¿A qué cree que se debe esto?
Me he hecho la misma pregunta. A qué viene ahora explicar tu vida personal en un momento en el que el país está como está, con los retos políticos y económicos que tienen Barcelona y Catalunya. Me ha sorprendido y no favorablemente. No sé si es el momento y no sé si tiene demasiado interés.

¿Se puede hacer una lectura electoralista?
No veo salir ahora, a no ser que se busque una notoriedad perdida por falta de ideas políticas o propuestas, que es lo que yo veo en los comuns, una falta total de propuestas. Tampoco lo critico. Que cada uno explique lo que quiera.

Collboni se muestra muy crítico con Colau  / ESTHER TEJADA-COLECCIONISTAS DE MOMENTOS

Collboni se muestra muy crítico con Colau  / ESTHER TEJADA-COLECCIONISTAS DE MOMENTOS


El verano pasado hubo varios episodios de turismofobia, ¿cómo se puede acabar con estos episodios?
Todo gobernante de una ciudad como Barcelona, con tanto turismo, tiene que tener claro que turismofobia es una forma de xenofobia. Es estigmatizar al visitante. Si se mira así, igual cambia un poco la perspectiva. Que haya presión excesiva del turismo sobre algunos barrios de la ciudad, no quiere decir que haya una presión excesiva sobre el conjunto. Alimentar o no combatir con fuerza los brotes de turismofobia, o ser complaciente con los brotes de turismofobia, perjudica a la economía de la ciudad. Y espero equivocarme, pero dentro de unos meses podríamos ver en términos económicos las consecuencias de la bajada del turismo. La ciudad hay que preservarla como un espacio donde la gente vive y trabaja, y una de sus industrias potentes es el turismo. Hay que reencontrar el equilibrio, pero algunos discursos son perjudiciales para la ciudad.

 "La turismofobia es una forma de xenofobia. Es estigmatizar al visitante" 

Precisamente, uno de los efectos de la inestabilidad económico de los últimos meses ha sido un descenso del turismo. ¿Cómo se puede recuperar?
Encuentro a faltar un plan de choque por parte del Gobierno. Se tendrían que haber anunciado ya medidas extraordinarias. Nosotros hicimos algunos avances con un par de cumbres económicas. Propusimos en el plenario unas comisiones. Cuando tengamos un buen diagnóstico, seguramente habrá que hacer algún plan que tenga que ver con la promoción comercial y turística. También harán falta medidas sociales en términos de ocupación, si el paro, como me temo, sube. Estos días se ha conocido un dato del servicio de estudios del BBVA que dice en 2016 fuimos la comunidad autónoma que más creció en PIB, y en 2017 seremos la última del ranking.

Estamos a pocos días de las elecciones del 21-D y probablemente ninguno de los dos bloques, el independentista o el constitucionalista, obtendrá la mayoría necesaria. ¿Cómo lo ve?
El bloque independentista no está diciendo nada nuevo para solucionar el problema. Continúan hablando de la independencia, que se desplegará la República. Y en el bloque no independentista, veo a Ciudadanos y PP que dicen exactamente lo mismo que antes. Como si aquí no hubiera pasado nada nuevo. La conclusión es que si seguimos con el inmobilismo del PP y Ciudadanos o la ruptura sostenida en el tiempo de los independentistas, difícilmente encontraremos una solución. Nosotros estamos intentando proponer soluciones, teniendo en cuenta que las cosas han cambiado y que se ha demostrado la estafa política que ha sido el independentismo. Ha provocado una crisis económica y una fractura social que hasta ahora no se había dado en la etapa democrática. Quiero pensar que hay gente que todavía no ha decidido su voto y que optará por propuestas nuevas. Se escoge al presidente de la Generalitat. A veces parece que lo olvidamos. Hay que plantearse quien tiene que arreglar esto y qué cualidades y habilidades tiene que tener quien se ponga a la cabeza del gobierno. Yo solo veo a una persona, Miquel Iceta.

Y el resultado de las elecciones, ¿cómo puede afectar a la gobernabilidad de Barcelona?
Podemos confirmar una sospecha que muchos hemos tenido y es que la famosa llave de la que habla Xavier Domènech [líder de Catalunya En Comú Podem] es la llave que le ha dado ERC y el PDeCAT. Es la llave que Colau le ha dado a Trias para aprobar los presupuestos. Todavía puede se peor. Me temo que puedo haber un pacto entre los independentistas y los comuns.