Operación policial contra el terrorismo yihadista / EFE

Operación policial contra el terrorismo yihadista / EFE

Gran Barcelona

Acusados de crear una célula yihadista en Badalona niegan los hechos: "El terrorismo me da miedo"

Tres hermanos aseguran que no realizaron labores de captación, adoctrinamiento y radicalización

5 abril, 2022 18:06

Los tres hermanos acusados de integrar una célula perteneciente al grupo islamista radical Hizb Ut Tahrir al Islami ubicada en Badalona han negado este lunes que se dedicaran a realizar labores de captación, adoctrinamiento y radicalización. "Nunca hablo del terrorismo porque me da miedo", ha asegurado uno de ellos.

La Fiscalía solicita, para cada uno de los acusados, nueve años de cárcel por un delito de integración en organización terrorista o, de forma subsidiaria, una condena de 7 años y 6 meses de prisión por un delito de captación y adoctrinamiento terrorista, añadiendo igualmente una multa de 18 meses por una cuota diaria de seis euros.

En la primera sesión de la vista oral que se sigue en la Audiencia Nacional los acusados han descartado que las reuniones que se celebraron en su domicilio particular fuesen en realidad encuentros destinados a un único fin: el envío de voluntarios para participar en acciones violentas de DAESH en la guerra de Siria.

SIMPATIZANTE DEL GRUPO RADICAL

"No todos los musulmanes somos radicales. No todos hablamos de lo mismo, también se habla de las mujeres, del fútbol: de cualquier cosa", ha sostenido Hicham L. que, a pesar de reconocerse como simpatizante del grupo radical, ha señalado que a esas reuniones no acudían otros simpatizantes, sino "amigos y familiares".

A uno de esos encuentros celebrados a lo largo de los años, según el fiscal, habría acudido Mohamed Kaouch, un joven marroquí residente en la misma localidad que tomó la determinación de viajar hasta Siria para combatir. El propio Kaouch murió unos años después víctima de un bombardeo.Hicham ha reconocido que conocía al joven mientras que sus otros dos hermanos, los también acusados Khalid y Ben Gacem, han descartado que guardasen algún tipo de relación con él.

En relación a los audios y los documentos que se encontraron en los registros policiales, Hicham se ha excusado aludiendo al origen de los USB y discos duros. "Un montón de veces cogemos chatarra para vender y para reutilizar. Al igual lo cojo de la calle y no se lo que es, no me dio tiempo ni de vaciarla", ha asegurado apuntando que los archivos encontrados podían ser de un "dueño anterior".

LIBROS Y DOCUMENTOS

El segundo de los hermanos, Ben Gacem, también ha echado balones fuera al ser interrogado por los libros, documentos y revistas hallados en su vivienda. Según ha defendido es analfabeto y no tenía posibilidad de leer nada; si los tenía, ha sostenido, es porque se los fueron entregando a la salida de la mezquita a la que acudía a rezar. Khalid, el tercer hermano, se ha confesado como un ciudadano que profesa la fe musulmana "con moderación" desde hace 20 años. Si en su móvil se encontraron imágenes relacionadas con DAESH, ha apuntado, no fueron porque él accediese a las mismas. "No conozco de descargas ni de nada", ha apostillado.

Lo que sí que han reconocido los tres acusados es que conocían a Riyad Al Bayed que, según ha explicado el jefe de grupo de la Brigada General de Información de Barcelona, era un "referente religioso" y una suerte de representante de Hizb Ut Tahrir en España.

El escrito del Ministerio Fiscal detalla que los tres hermanos tenían con él una "relación de dependencia jerárquica". Y también habla de una reunión convocada por el propio Al Bayed en febrero de 2020 a la que acudieron dos de los acusados y un "número destacado de militantes".

TESTIGO PROTEGIDO

Este lunes también ha declarado un testigo protegido que llegó a la comisaría después de haber ido a una mezquita a denunciar la existencia de estas reuniones. A pesar de que la defensa de los tres acusados haya solicitado que se desvele la verdadera identidad de este testigo, la petición ha sido declinada por el tribunal tras el rechazo de la defensa con el objetivo de preservar su seguridad. Se trata de una persona "con bastante miedo" y que "no sabía lo que tenía que hacer".

En relación a los tres hermanos, un agente ha explicado que la célula que presuntamente formaban respondía a los parámetros de otras similares descubiertas con anterioridad: eran pequeñas, de entre 5 y 7 miembros, y solían adoptar medidas de seguridad para evitar que fuesen descubiertas.