Rosell (i) y Trias (d) en un fotomontaje de Metrópoli / METROPOLI

Rosell (i) y Trias (d) en un fotomontaje de Metrópoli / METROPOLI

Información municipal

Trias y Rosell rechazan una lista conjunta para la alcaldía de Barcelona

El exalcalde está en contra de la idea del expresidente del Barça de ‘evitar’ la política, pese al potencial electoral que podría tener ese ticket electoral

16 noviembre, 2022 00:00

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Xavier Trias busca el mejor momento para anunciar su candidatura a la alcaldía de Barcelona. La dirección de Junts per Catalunya (JxCat) le anima de forma constante. El último en hacerlo ha sido Josep Rius, vicepresidente de JxCat y diputado en el Parlament. No tiene la necesidad de hacerse conocer, y mantiene su idea de “recuperar la política”, algo que choca directamente con el proyecto que defiende Sandro Rosell, que sigue valorando, “junto con otras personas”, su candidatura como alcaldable. Los dos, por razones distintas, rechazan participar en una lista conjunta, a pesar de haber recibido comentarios y reflexiones sobre esa posibilidad, que tendría “potencial electoral”.

La dirección de JxCat, centrada ahora en la polémica con ERC sobre el delito de sedición, espera con paciencia la decisión de Trias. Tanto Josep Rius, como Jordi Turull, y después de la entrevista que tuvo Trias con Carles Puigdemont en Bruselas, saben que el exalcalde de Barcelona tiene una clara pretensión que se ha respetado: obtener el mejor resultado posible y buscar luego acuerdos, sin cortapisas del partido, con el PSC o con ERC, y por ese orden. Es decir, “volver a la política, a la negociación y el acuerdo, a los consensos de ciudad”, según apuntan fuentes de su entorno.

Con ese objetivo, la figura de Rosell “no aporta”. Trias se muestra esquivo con el expresidente del Barça. El hecho es que para Sandro Rosell la posibilidad de formar parte de una lista con Trias tampoco es de su agrado. La apuesta --y todavía no se ha tomado una decisión definitiva-- es elaborar una candidatura propia que tenga como lema “la gestión”, por encima de cualquier ideología. En las reuniones con las personas con las que ha contactado Rosell se insiste en que no desea “profesionales de la política”, y que su idea es la de no cobrar como concejales, si son elegidos en el consistorio de Barcelona.

Xavier Trias con Ada Colau, en el pleno municipal / EFE - QUIQUE GARCÍA

Xavier Trias con Ada Colau, en el pleno municipal / EFE - QUIQUE GARCÍA

El expresidente del Barça confía mucho en las peñas del club, en los socios que tienen un buen recuerdo de él y que pueden actuar como prescriptores de su candidatura. Si la participación no es muy alta, Rosell podría lograr dos o tres concejales.

Pero, ¿son electorados distintos los que se inclinarían por Trias o Rosell? En las filas del exalcalde de Barcelona hay conciencia de que se podría tratar de un votante similar, de centro-derecha liberal, soberanista, con buen recuerdo de la época de CiU, y vecino de los barrios más acomodados de la ciudad. Y es por ello por lo que en los debates internos surge la pregunta, ¿un ticket electoral Trias-Rosell?

¿Y LOS IRREDENTOS?

Sin embargo, los dos aspirantes –aunque lo deben concretar en las próximas semanas— quieren cosas distintas. Trias cree que puede tener una segunda oportunidad, y que él mismo es “el mensaje”, confiado en que dejó una buena imagen como máximo dirigente de la ciudad. Es lo que apuntó este martes Josep Rius, en una entrevista en el programa Cafè d’idees, de La 2. “En Barcelona se recuerda que fue un buen alcalde, y esperamos su decisión”, señaló.

Sandro Rosell, en una entrevista en 8tv / 8TV

Sandro Rosell, en una entrevista en 8tv / 8TV

El entorno de Trias confía en que, una vez se clarifique su candidatura, Rosell se incline por no presentar su lista. Aunque los dos se puedan dirigir a públicos distintos, habrá muchos electores de frontera. Y Trias necesita “hasta el último voto con aire convergente o independentista liberal”.

El equipo de Trias no pasa por Sandro Rosell. En cambio, desea contar con el exconseller de Salut, Josep Maria Argimon, y por Neus Munté y Jordi Martí. Y deberá lidiar hasta el final con la dirección de JxCat, que presionará –bajo la batuta de Puigdemont— para que incorpore a algún dirigente más fiel esa línea que se identifica con el independentismo irredento. Esa es la pugna de Trias.

Rosell, en cambio, cree que puede haber una oportunidad para la antipolítica, en el sentido de que se confíe en un puñado de personalidades para conducir la ciudad de Barcelona, sin connotaciones ideológicas claras, ni con afinidades a unas siglas concretas. El expresidente del Barça busca una conexión directa con el elector de Barcelona, como si se tratara de las elecciones al propio club. Rosell fue, precisamente, el presidente más votado de la historia del F.C.Barcelona. Pero “las elecciones al Ayuntamiento de Barcelona son otra cosa”, insisten en el entorno de Trias.