Ha empezado la campaña electoral sin lugar a dudas. Todos hacen campaña. Bueno, hay que afirmar que decir todos, con contundencia, es una falacia. Ni VOX, ni CUP, ni Ciudadanos, ni PP están en eso. El PP ni siquiera tiene candidato y ha adoptado un perfil bajo, muy bajo diría yo en el ámbito municipal, Ciudadanos bastante tiene con lo que tiene y los dos extremos están un poco en fuera de juego. Hasta Xavier Trias hace campaña aunque no sea candidato, todavía. El líder de Junts se dejó ver en un acto de Jaume Collboni, presencia nada baladí y cargada de intencionalidad, y en otro del Círculo del Liceu, donde se dejó ir y afirmó que será candidato siempre “que me dejen hacer lo que me dé la gana”. Ni más ni menos.

Por el contrario, sería muy osado decir que Ernest Maragall está en campaña porque sigue difuminado. Las encuestas, algunas, le dan posibilidades pero él, que se arroga el futuro de la ciudad, sigue sin aparecer en el presente. Debe estar sumando fuerzas para soportar una larga campaña. Y sí, sin duda, está en campaña Eva Parera de Valents. Su eco mediático es escaso y circunscrito a unos medios determinados pero mantiene un activismo continuo. Necesita hacerse notar, tanto en Barcelona como en su aspiración de partido nacional, para derrotar a unas encuestas que, de momento, no la detecta del todo.

También está en campaña la alcaldesa Colau. Ante la escasez de buenas noticias en su gestión, ha tirado de manual. Ha encontrado a su enemiga íntima en Isabel Díaz Ayuso, y ha puesto en valor que es mujer. Si es criticada, es porque es mujer. Si se pone en cuestión sus acciones, es porque es mujer. Vamos se ha criticado a la alcaldesa porque es mujer, por la gestión del puerta a puerta, por los desaguisados de su urbanismo, por la crisis de los cementerios, por la inseguridad, por la vivienda, por el fiasco de Sant Antoni…….. ¿En serio? De verdad, hemos de entender la política desde esta formulación machista de la alcaldesa. Sí, machista. Y la guinda ha sido “por ser mujer y bi”. ¿En serio? Lo dice la misma que hizo llorar a una estudiante de periodismo porque le hizo una pregunta. No ofenden las preguntas, ofenden las respuestas. En este acto, Colau se sintió pletórica para machacar a la estudiante. En Catalunya Ràdio, se presentó como víctima de una sociedad machista. Agiten y combinen, ambos actos y sacarán como conclusión que Colau ha tirado de estereotipos machistas para ponerse en valor. Consejo: sea más agresiva con esta sociedad y menos con los débiles.

El líder del PSC también está en campaña Ha optado por dos líneas. Una no mediática contactando con colectivos de todo tipo y escuchando, algo que se agradece de un político. Otra mediática plagada de actos en los que desgrana su propuesta para Barcelona. Gustará más o gustará menos pero es el único que presenta alternativas y agita el debate sobre la ciudad. Hace unos días en Barcelona, como se apunta al inicio del artículo, ayer domingo en un mitin junto a Pedro Sánchez, que sabe que Barcelona es el icono que dirá si el PSOE gana o pierde las municipales pase lo que pase en el resto de España, y Salvador Illa que aspira a una Barcelona socialista como primer paso hacia la Plaza Sant Jaume, y hoy lunes en un foro en Madrid. Jaume Collboni sabe que debe ir arropado pero también centrando el debate sobre la ciudad. Es su punto fuerte. Colau, mientras, irá a lo suyo. De Barcelona no parece que quiera hablar. Quizá sea porque no tiene nada bueno que contar. Son los primeros destellos de campaña electoral.