A partir de marzo, los barceloneses que no puedan despegarse del móvil ya no tendrán que estar pendientes de si cogen un autobús con un rombo azul que indique que el vehículo dispone de wifi. Según ha anunciado el consistorio este jueves, a partir del próximo mes toda la flota de Transports Metropolitans de Barcelona (TMB) estará dotada de conexión gratuita.
Actualmente 380 autobuses públicos disponen del servicio, por lo que tras la implementación prevista la cifra aumentaría hasta los 1000 vehículos de los que dispone TMB. Se trata de una medida que, según ha explicado la concejal de Movilidad y presidenta de TMB, Mercedes Vidal, también ampliará las capacidades tecnológicas de los autobuses, ya que la conexión permitirá avisar de alteraciones en las pantallas interiores, actualizar las previsiones de frecuencias de paso y detectar posibles incidencias.
FRENTE COMÚN PARA ACABAR CON LA NORMATIVA VIGENTE
Durante la rueda de prensa, el primer teniente de alcalde, Gerardo Pisarello, ha criticado la Circular 1/2010 de la Comisión Nacional del Mercados de las Telecomunicaciones, que impide al consistorio prestar libremente el servicio wifi de forma ilimitada. Según la normativa, superar los 256 Kbp atentaría contra el principio de inversión privada en un mercado de libre competencia, por lo que el Ayuntamiento debe atenerse a este límite de velocidad.
Para promover un cambio en el marco jurídico vigente, Pisarello ha instado a todas las fuerzas del consistorio y a los ayuntamientos de otros municipios a crear “un frente común" que permita ejercer presión y explorar otras alternativas.
COMBATIR LA BRECHA DIGITAL
El concejal también ha remarcado que la iniciativa sitúa a Barcelona como una ciudad pionera tanto a nivel estatal como europeo y la ha calificado como un avance para “combatir la brecha digital”.
Y es que como ha recordado Pisarello, entre los barrios de la capital existen diferencias de hasta 34 puntos porcentuales respecto al acceso a Internet en la vivienda, como demuestra el 96% de hogares con conexión en Les Corts, frente al 62% de Torre Baró. Un contraste que contribuye a la división de los barceloneses en función del nivel de renta y que se agrava cuando se combinan factores como el desempleo y el nivel de educación.
Asimismo, Vidal ha añadido que el wifi en los autobuses ofrece un servicio “en clave de igualdad” ya que la mayoría de los usuarios del transporte público son mujeres. Una cifra especialmente alta en el caso de los autobuses, donde el sector femenino conforma el 67% de los pasajeros.