Fachada de la Antiga Cereria Lluís Codina, ahora reconvertida en una tienda de turrones / INMA SANTOS

Fachada de la Antiga Cereria Lluís Codina, ahora reconvertida en una tienda de turrones / INMA SANTOS

Vivir en Barcelona

La Antiga Cereria Lluís Codina, una historia de cirios, alpargatas… y turrones

El establecimiento conserva el rótulo y los elementos exteriores e interiores originales de 1825

6 noviembre, 2020 00:00

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Nada por aquí, nada por allá…. Tachán: una tienda de Virginias, la marca de chocolates y turrones, ha aparecido como por arte de magia en el corazón del Gòtic. Se ha instalado en la calle del Bisbe 2 B, en la Antiga Cereria Lluís Codina, un comercio emblemático de Barcelona, que se dedicó a la venta de velas de cera desde el 1825 hasta su cierre en 2016 y que fue reconvertido en la alpargatería Dos Espadrilles, en 2017.

Ahora, bajo el rótulo original de la cerería, de la misma manera que las espardenyes artesanales sustituyeron los cirios y las velas, los estantes y vitrinas se han llenado de turrones, chocolates y productos tradicionales de la marca Virginias. Un deleite para la vista y el paladar, y de nuevo un producto artesanal que combina a la perfección con un establecimiento casi bicentenario, calificado con el máximo nivel de protección, el E1.

Interior de la Antiga Cereria Lluis Codina / INMA SANTOS

Interior de la Antiga Cereria Lluis Codina / INMA SANTOS


El establecimiento tiene dos escaparates en los laterales con una estructura de madera perimetral montada sobre una reja de hierro fundido con pequeñas balaustradas. La puerta de la entrada está formada por una estructura de tres hojas de madera que crean una zona de vestíbulo con la puerta vidriera grabada al ácido. El rótulo, al nivel de los dinteles, ocupa los tres portales de fachada y es de vidrio pintado con pan de oro. En la parte superior central del rótulo hay un panel decorativo con un escudo rodeado por el texto "cera verde de abeja", sujeto por una filigrana de talla de madera.

En el interior del local, se conserva el suelo de cuadros blancos y negros. Los muebles de estanterías con vidrieras sobre una base de cajones y armarios llegan hasta el techo y ocupan casi todas las paredes. Los mostradores, formados por cuarterones, tienen los montantes laterales de talla y ménsulas bajo el mármol.

Curiosidad: La tienda conservó con la primera reforma el antiguo obrador de la cerería, en el que se descubrió una máquina de hacer cera de más de 200 años de antigüedad. El sótano se puede ver a través de una ventana abierta en el suelo de la entrada.

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