'Enseñar es aprender': un viaje artístico al corazón de EINA

El diseño incide en la vida cotidiana, pero, ¿cómo y con qué intensidad? EINA, Centro Universitario de Diseño y Arte de Barcelona, inaugura la exposición Enseñar es aprender, un homenaje a Albert Ràfols Casamada y a Maria Girona en el centenario de su nacimiento. Esta iniciativa forma parte del conjunto de actividades organizadas por la Fundación EINA, la Fundación Bassat y la Fundación Vila Casas para conmemorar esta efeméride. La muestra permanecerá abierta del 9 de mayo al 9 de junio y se puede visitar de lunes a viernes de 10:00 a 19:00 horas, y sábado de 10:00 a 14:00 horas.

Artistas, pintores, poetas, humanistas y pedagogos. Albert Ràfols y Maria Girona son fundamentales para entender la historia de EINA. Las ganas de influir en la gris sociedad de los años sesenta les llevará a fundarla en 1967, junto con otros artistas, arquitectos, diseñadores e intelectuales del momento. Son años de agitación política, antifranquismo cultural y apertura a nuevas ideas y nuevos lenguajes plásticos. El diseño se presenta como un territorio de incidencia social del arte en la vida cotidiana. Los ideales de la Bauhaus y los métodos de la escuela de Ulm se hacen presentes en la formación e inspiran un modelo de enseñanza centrado en despertar la creatividad del alumno sin imponer ideales estéticos ni recursos técnicos.

La exposición se centra en su aportación pedagógica entre los años 1967 y 2009, basada en la enseñanza del diseño, el arte y las humanidades. Reúne obras procedentes del fondo de arte de la Fundación EINA además del extenso material de archivo vinculado a los artistas. Como explica Miquel Molins, presidente del Patronato de la Fundación EINA, "la muestra pone énfasis en su vertiente pedagógica y explica el legado que nos dejaron a través de las materias que impartieron en los estudios de Diseño y de Arte de la escuela".

Visitantes de una exposición de arte / EINA

Enseñar es aprender, que sintetiza las performances, exposiciones e iniciativas pedagógicas de los artistas, está comisariada por Xavier Olivé -diseñador, estudiante y profesor de EINA, y hoy miembro del patronato de la Fundación-, Josep Aregall -diseñador, estudiante y profesor de EINA- y Rubén Alcaraz -responsable del archivo de EINA-. Como explica Olivé: "Acabados los estudios, muchos alumnos nos convertíamos en adjuntos a los profesores y, después, en maestros titulares. Al cabo de los años, a todos nos unía una amistad. Yo mismo impartí distintas materias para no convertir la docencia en una rutina. Enseñar es aprender".

ACTIVIDADES Y TALLERES

En paralelo a la exposición, organizada por profesores y alumnos de la escuela, se realizarán distintas actividades cada sábado por la mañana, con visitas guiadas a la colección de Josep Aregall con Rubén Alcaraz, o a una demostración de arte floral en homenaje a Maria Girona y Albert Ràfols a cargo de Alfons Tost y Roser Bofill. También se comentará la exposición con Xavier Olivé y se organizará una clase de dibujo al natural en homenaje a Francesc Artigau, profesor de dibujo de EINA, coordinada por Mar Saiz. Además, se expondrá una muestra de documentos originales del fondo de archivo con Rubén Alcaraz. Las inscripciones a las actividades ya están abiertas y pueden hacerse a través del enlace oficial.

Visitantes de una exposición de arte / EINA

HOMENAJE CENTENARIO

Albert Ràfols se inicia en el dibujo y la pintura a través de su padre, artista novecentismo que apoyó su decisión de abandonar los estudios de arquitectura para centrarse en la creación a través de las artes plásticas. Su recorrido pictórico se relaciona con el post-expresionismo y la figuración en sus inicios, aunque evoluciona cada vez más hacia la abstracción con el paso del tiempo. Sin embargo, desarrolló una importante trayectoria como escritor de poesía y ensayos, con la publicación de varios libros, así como escenógrafo e ilustrador.

Maria Girona, en cambio, se inició en el mundo de la pintura de la mano de su tío y, más tarde, estudió en la Academia Tàrrega de Barcelona, donde conoció a Albert Ràfols. Su pintura se caracteriza por la total coherencia entre su personalidad y su obra, que se impregna con un diálogo con el arte, donde la sensibilidad y la inocencia son rasgos fundamentales.

Rubén Alcaraz, uno de los comisarios de la exposición, describe EINA como un espacio singular de aprendizaje y de investigación, así como un punto de encuentro y confluencia entre artistas, diseñadores y pensadores. "Es un museo que refleja la historia de esta peculiar aventura pionera, que un grupo de mentes inquietas iniciaron a finales de los sesenta", cuenta Alcaraz. Josep Aregall, también comisario de la exposición, explica que estudiar en esta escuela en los años setenta "fue como precipitarse por un barranco y volar sobre campos preciosos de nuevos conocimientos, nuevas texturas y colores. Empezar a enseñar, poco después, me hizo tomar el compromiso de traspasar y revivir ese vértigo con todos y cada uno de los alumnos".