Vista del interior del Jazz Club Milano / MILANO

Vista del interior del Jazz Club Milano / MILANO

Vivir en Barcelona

El mítico Jazz Club Milano tira de imaginación para sobrevivir

La icónica coctelería y club de jazz barcelonesa busca mecenas para seguir en pie tras las medidas restrictivas del Govern

20 octubre, 2020 15:06

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El futuro de Milano, uno de los clubs de jazz referentes de Barcelona, “cuelga de un hilo”. Así lo anuncian en su página web, donde también aseguran que no saben “si se podrán recuperar de este segundo batacazo” que supone el nuevo cierre de bares y restaurantes aplicado por la Generalitat.

MICROMECENAZGO

Pero no pierden la esperanza. Para intentar sobrevivir, este local ubicado en Ronda Universitat ha lanzado una campaña de micromecenazgo. La iniciativa se ha gestionado a través de la plataforma Patreon, y propone diferentes cuotas. Estas van desde los 15 euros al mes para simpatizantes, hasta los 1.000 euros mensuales para empresas que quieran colaborar y evitar su cierre definitivo. A cambio, ofrecen recompensas de fidelización a los colaboradores. Algunas de ellas son una ubicación preferente en los conciertos, un 15% de descuento en la primera copa, o una cena mensual para dos personas.

POR NECESIDAD

El gerente del local, Ramón Elarregola, explica a este medio que la idea de lanzar esta campaña surgió por necesidad. El encargado de gestionar la programación musical, Quim Gifré, se la propuso porque conocía otros locales que se promocionaban así, y le pareció una idea genial. 

Elarregola explica que en el período que han podido abrir tras el confinamiento han tenido varios hándicaps. “El turismo, que era una parte importante de nuestro público, se ha reducido”, señala. Asimismo, añade que el local depende mucho de la música en vivo y que con un 50% de aforo es complicado programar música porque el artista tiene un caché.

Músicos en un concierto del Jazz Club Milano

Músicos en un concierto del Jazz Club Milano


Los problemas no acaban aquí. El gerente destaca también que “hay unos gastos fijos que se han de pagar cada mes, y es algo muy complicado en este contexto. Estamos en el centro y aquí todos los alquileres son de cinco cifras”.

ADIÓS AL BARCELONA JAZZ FESTIVAL

Aún así, explica que poco a poco fueron remontando. “Estábamos muy ilusionados porque este año íbamos a acoger el festival de jazz de Barcelona, que tenía que empezar la última semana de octubre. Pero ahora ha venido el golpe este y nos tocará volver a remar”, apunta.

La iniciativa de mecenazgo se puso en marcha a finales de la semana pasada. Aunque por ahora ha recibido sobre todo aportaciones de familiares y amigos, Elarregola espera poder contar con la ayuda de entidades potentes o incluso públicas.