Así es el piso más caro de Barcelona: propiedad de Mandarin y en venta por más de 40 millones

La venta de los pisos de lujo del Mandarin ha sido una de las operaciones más comentadas en el mercado inmobiliario de Barcelona durante el último año. El complejo residencial, ubicado en el paseo de Gràcia con la avenida Diagonal, tiene los apartamentos más caros de España, que oscilan entre los 2 millones de euros y los más de 10 millones de euros en los penthouses, tal y como informó Metrópoli.

La vivienda más cara de Barcelona se encuentra en el edificio: se trata del Grand Penthouse, con un precio de salida de al menos 40 millones de euros. Es un dúplex de 650 metros cuadrados, con cuatro habitaciones y un diseño de superlujo. 

RETRASOS EN LA ENTREGA

La promotora KKH Propery Investors, que se encarga de la venta de los pisos, planeaba tener todos los inmuebles vendidos antes de este verano y entregar las viviendas a principios de año.

Vistas desde el piso 16 de las residencias Mandarin Oriental / METRÓPOLI

No obstante, todavía quedan apartamentos disponibles –como el más caro de la capital catalana– y los propietarios podrán mudarse en septiembre de 2022, con una gran demora respecto al plan inicial.

PRECIOS DE LAS PLANTAS SUPERIORES

En las plantas superiores (17, 18 y 19), el metro cuadrado parte de los 45.000 euros.

Los apartamentos superiores cuentan con 580 metros cuadrados, tienen cuatro habitaciones y vistas de 360 grados de toda la ciudad. Con un precio de partida de 45.000 euros cuadrados, estas viviendas superarían los 26.000.000 de euros. 

Cocina de las residencias Mandarin en Barcelona / MANDARIN

PISOS VENDIDOS EN 2021 

A lo largo de 2021, se vendieron algunas unidades ubicadas en las plantas inferiores a inversores con precios de salida a partir de los 2,3 millones de euros. No obstante, a finales del año pasado, tan solo habían vendido ocho de las 34 viviendas disponibles, menos del 20% del total de inmuebles.

Pese a que la venta no avanza al ritmo previsto, Mandarin Residences habilitó un sistema de reservas para que, aquellos interesados en un apartamento en concreto, pudiesen guardarlo aunque otro comprador ofreciese un importe superior o un pago avanzado por la vivienda.

Este procedimiento se lleva a cabo a través del pago de 50.000 euros en el momento de la solicitud del piso, que después se devuelven al comprador –tanto si decide quedarse con el espacio como si no–. Lo más previsible, según fuentes cercanas a la promotora, es que los apartamentos de las plantas superiores sean los que "más rápido se vendan".

Dormitorio principal del piso piloto de las residencias Mandarin / METRÓPOLI

COMPRADORES

Entre los compradores de Mandarin Oriental Residences existen tanto compradores nacionales –en un menor porcentaje, alrededor del 40%– con interés de vivir de forma permanente en las residencias–, como compradores internacionales (60%), para los que, de forma mayoritaria, el piso será una segunda o tercera propiedad para estancias frecuentes o de larga duración. Entre los futuros propietarios, hay confirmada la compra por parte de un futbolista vinculado a Barcelona y de importantes empresarios catalanes.

El precio de los apartamentos, que oscila entre los 2 millones y los más de 10 millones de euros en los penthouses, es inferior a los precios que se alcanzan con viviendas comparables en los mercados más consolidados de lujo como Londres, Montecarlo o Nueva York. No obstante, el nuevo precio de salida de las plantas superiores, se alinea al mercado internacional.

Distribución del salón del piso piloto de las residencias Mandarin / METRÓPOLI

VISTAS DE BARCELONA 

El gran reclamo de los prestigiosos pisos son sus espectaculares cristaleras. No obstante, las vistas a Barcelona varían mucho en función del piso, al igual que el precio de cada uno de los apartamentos. Todo depende de su orientación y altura. Los apartamentos parten de los 2,3 millones de euros y los ubicados en los pisos superiores sobrepasan los 10 millones de euros. 

La construcción mantiene la altura original de 75 metros de la antigua Torre Deutsche Bank. El espacio se ha transformado íntegramente y lo configuran un total de 20 plantas. Se ha convertido en el edificio residencial más alto del centro de la ciudad y en uno de los 50 más altos del skyline barcelonés.  En el siguiente enlace puedes consultar cómo son las residencias, a las que pudo acceder este medio: