Llevaba un tiempo la ex concejal de Ciutat Vella Gala Pin sin dar la nota. Pero ha vuelto a las andadas. La que ya no es nadie en la vida pública ha vuelto a sembrar polémica tras fotografiarse frente a un grafiti (poco artístico, más bien vandalismo puro) en el Palau Centelles.
Aunque el palacio vandalizado del siglo XV se encuentra en el distrito que ella gobernó, quizá la ex edil desconoce su valor patrimonial. Tampoco se sabe si el mensaje que plasma junto a la fotografía ["'Mamá, estoy bien'. Mensaje para mi madre"] es irónico o no. Pero se ve a Gala Pin sonriente. ¿Le hace gracia, se lo toma a cachondeo o es su particular forma progre de protestar contra el vandalismo? Se desconoce. Pero su pose risueña dista mucho de la cara de cabreo de muchos vecinos del barrio al ver la desafortunada pintada en un edificio patrimonial del Gòtic. Por desgracia, los grafitis y el vandalismo en edificios históricos es una lacra en aumento en Ciutat Vella, tal y como ha denunciado este medio en reiteradas ocasiones. El céntrico distrito es de nuevo la diana de críticas de la oposición y los vecinos, con la gestión de Jordi Rabassa en entredicha.
Solo falta que su predecesor se sume a la foto para ver si iguala las meteduras de pata de Gala Pin, a quien muy pocos vecinos echan de menos en Ciutat Vella.