Eloi Badia se estrella en Girona en las elecciones catalanas. La apuesta de los comunes de incorporar al exconcejal barcelonés como cabeza de lista en las tierras gironinas ha salido rana y no consiguen representación. El resultado es una muestra más de la creciente debilidad de los comunes --que también han perdido escaños en Barcelona, Lleida y Tarragona-- y que poner una figura que nada tiene que ver con Girona no ha ayudado en nada.

La decisión se conjuró desde Barcelona y por influencia de Ada Colau, ya que Badia tenía la confianza plena de la exalcaldesa. De hecho, también lo integró en la candidatura de los comunes en las pasadas elecciones generales del 23 de julio. Badia iba de número cinco y la candidatura obtuvo, precisamente, cinco representantes.

Los comunes querían recuperar el poder en Girona tras siete años de sequía, pero la fórmula Badia no ha conseguido los votos suficientes. Incluso ha acentuado el descalabro del partido. Comuns Sumar han conseguido un 3,2% de los votos en la circunscripción de Girona, cerca de un punto menos que en las elecciones de 2021, cuando consiguieron 4,05% de votos.

"El último escaño de Girona está entre Aliança Catalana y los comunes" era uno de los mensajes más recurrentes que Badia publicaba en sus redes sociales. Lo repitió hasta la saciedad durante toda la campaña y tampoco ha servido para convencer a los votantes.