Defensoras del territorio, de los derechos humanos que atienen a las mujeres y de su participación política. Sus batallas invisibles para occidente esconden verdaderas luchas personales, sociales, económicas y vitales contra los desplazamientos forzados, las extractoras que no cuidan los intereses de la población local, las mafias relacionadas con la trata de personas, los secuestros y las mentes perversas “contratadas por multinacionales o instituciones turbias” para acabar con ellas.
Mujeres activistas de mesoamérica se han reunido en Barcelona para explicar algunas de sus demandas como mujeres y como ciudadanas de México, Guatemala o El Salvador.
Según el último informe sobre las Agresiones a las Defensoras de Mesoamérica, elaborado por la Iniciativa Mesoamericana de Mujeres Defensoras de Derechos Humanos, las mujeres que batallan por sus derechos sexuales y de reproducción son el grupo de féminas que más agresiones recibe por parte de la sociedad. Solo entre los años 2014-16, el estudio contabiliza 56 agresiones y un 13% de ellas, corresponden a asesinatos.
“Los gobiernos feminicida y los grupos paramilitares son nuestros opresores”, ha afirmado Aura Lolita Chávez, feminista y activista guatemalteca. La misma que ha lanzado la necesidad del cuidado de la mujer por si misma y en comunidad, “sin análisis emocionales en base a la primacía y sin verdades absolutas, si no, de la forma comunitaria y ancestral”. Aura ha señalado algunas empresas extractoras de recursos naturales que cuentan con el beneplácito del estado manifestando que “sus planes comerciales son más sofisticados que nuestros (población local) planes de vida”.
Por otro lado, la Taula per Mèxic de Barcelona ha contado con la participación de la sexóloga Sandra Peniche quien asegura el recrudecimiento de ciertas políticas limita las libertades sexuales de las mujeres mexicanas. Ella, que ha sido víctimas de un intento de homicidio, trabaja “por la educación sexual y la prevención de los embarazos no deseados” en Yucatán, ha aclarado. Peniche es una mujer referente en contra del pensamiento conservador y eclesiástico del país, escribe en prensa y pese al ataque recibido, no tiene miedo de continuar con lo que considera que es un derecho humano.
Sonia Herrera, integrante de la Taula per Mèxic también ha resaltado algunos datos que no casan con la integridad física y las libertades de todos los ciudadanos mexicanos. Según el último Informe sobre la Situación de los derechos humanos en México en 2017, elaborado por la organización, 53 mujeres fueron asesinadas en el último año y 34.000 personas personas desaparecieron en la última década. Unos datos que, Herrera ha señalando el alto nivel de impunidad que existe cuando las mujeres denuncian estos casos.
También, desde El Salvador, Sonia Jeanette, ha denunciado el uso y la ocupación del suelo boscoso en pro de la industria extractiva. “Zonas calificadas como reserva natural que acaban explotándose con la complicidad de los gobiernos locales”, ha explicado la acivista. Ella, con un grupo de mujeres iniciaron las marcha “De luto por Santo Tomás” a favor de proteger el medio natural y “nos lanzaron piedras diciéndonos que estábamos en contra del desarrollo”. El desarrollo que, según ha explicado “equivale a la construcción de casas en medio de la naturaleza a unos precios que no alcanza pagar la población local”. Jeanette ha remarcado que “lo que quiten a Mesoamérica, también le falta a este lado del mundo porque la naturaleza da la vida”.
La cita ha tenido lugar en el Col.legi de Periodistes de Catalunya y ha sido organizado por Calala, Taula per Mèxic y por la Iniciativa Mesoamericana de Mujeres.