Si estabas pensando hacerte influencer o instagramer, ¡olvídate! Según las últimas noticias en 2020 la gran mayoría de nuestros trabajos podrán ser sustituídos por robots, incluído el de los influencers y youtubers. Al parecer, ya existen perfiles en redes sociales, en los que los protagonistas son robots, como Lil Miquela.
A primera vista, Lil parece la típica it girl con sus fotografías perfectas, calculados outfits y su millón de seguidores. Es hispano-brasileña y está afincada en Los Ángeles, aficionada al streetwear, y como buena influencer tiene su propia tienda (de merchandising) en la que vende únicamente dos modelos de camiseta.
Parece real aunque de eso tiene poco, ya que Lil Miquela es un prototipo creado a ordenador, y a pesar de no ser real, ya ha conseguido más de un millón de seguidores y grandes contratos de publicidad. El último acuerdo fue con Prada, que quiso incorporar a este androide en su campaña SS18 collection y ofrecer un aire futurista a su colección.
Además de modelo también destaca como cantante con una dulce voz artificial. El pasado agosto, triunfó con el tema 'Not Mine', que alcanzó el puesto número ocho en la lista Spotify Viral.
Shudu también es una de las cyber-influencers que saltó a la fama cuando subieron a Instagram su rostro maquillado la maquillaron con un labial de Fenty Beauty, la firma de maquillaje de Rihanna, y subieron la foto a Instagram (sin saberlo la cantante). Muchos alavaron la belleza de la joven, pero otros criticaron el hecho de no contratar a una modelo de verdad.
Varios expertos ya apuntan que aunque aun hay que perfeccionar el formato, este tipo de androides serán los futuros influencers entre jóvenes y adultos, por lo que, los influencers tienen los días contados. Ironicamente la misma tecnología que lo vió nacer será la encargada de dejarlos en el olvido. La pregunta que muchos se hacen es, si este tipo de usuarios en la red conseguirán influir a las masas de la misma forma que lo hacen los actuales, como Dulceida, Marta Carriedo o Alex Doménech.