Ni el frío ni las precipitaciones impidieron que miles de argentinos llenaran este domingo las plazas de ciudades como Córdoba, Mendoza o Rosario contra el aborto. Quieren hacer campaña hasta el último momento. En la era del feminismo, con concentraciones constantes a favor del derecho a decidir de las mujeres sobre su cuerpo, parece increíble que el resultado de la votación se augure ajustado. La incertidumbre reina estos días sobre el país y el tema ha agrupado a los ciudadanos en dos bandos: a favor del aborto y en contra.
El próximo miércoles 13 de junio se decidirá en la Cámara de Diputados de Capital Federal si gana el progreso o el conservadurismo. Por ahora, el marcador está ajustado y la victoria o el fracaso dependerá de los votos de algunos indecisos que aún no se han pronunciado. El eje central de discusión es la interrupción hasta la semana 14 de gestación en todas las instituciones de salud.
Barcelona, por su parte, no quiere dejar de lado a Argentina y la Comisión Santiago Maldonado de la ciudad ha convocado para este miércoles una concentración frente al consulado. “Mostramos nuestro firme apoyo a la aprobación del Proyecto de Ley de Despenalización y Legalización de la interrupción voluntaria del embarazo”, reza el manifiesto al que ha tenido acceso Metrópoli Abierta. Los que quieran lo firmarán y a las 12.30 horas lo entregarán en el consulado donde se presentarán con pañuelos verdes, símbolo del aborto legal, seguro y gratuito.
ABORTO CLANDESTINO
En este sentido, se adhieren al movimiento feminista “por el derecho de las mujeres a decidir sobre su vida exigiendo políticas coherentes y sistemáticas que pongan fin a tantas muertes absurdas y evitables”, especifican. “La prohibición del aborto no evita que se produzca, sino que convierte su clandestinidad en la primera causa de muerte en mujeres embarazadas”, añaden al respecto.
Se estima que en el país de casi 44 millones de habitantes se practican 400.000 abortos anuales clandestinos y más de 50.000 hospitalizaciones por prácticas mal realizadas. No faltan tampoco las mujeres que viajan hasta el país vecino, Uruguay, donde sí es legal el aborto, para intentarlo. Aunque en la mayoría de los casos no se consuma, por no tener la nacionalidad.
Chile dio un pequeño paso en agosto hacia la legalización, aunque solo se puede realizar en caso de inviabilidad fetal, riesgo de muerte de la mujer y en embarazos producto de una violación. Ahora llega el turno de Argentina, el país más reivindicativo del Cono Sur. La decisión del próximo miércoles, en cualquier caso, hará historia.