“Rareza latinoamericana”. Así describe Francisca Cárcamo, la editora de la revista infantil Marcapáginas la aventura en la que se embarcó hace dos años. Este pequeño magacín para niños muy jóvenes es pionero en la ilustración e historieta chilena, y después de varias paradas por Europa y una última en la feria del libro de Madrid, ha aterrizado en la librería Abracadabra en su segunda presentación en Barcelona.
Deespués de trabajar tres años en una librería, Francisca Cárcamo descubrió un nicho de mercado y empujada por su amor hacia la ilustración y las historietas, entendió que era importante crear una obra para que los niños leyeran lo máximo que pudieran. “Se me ocurrió hacer Marcapáginas como consuelo al niño que se iba con la pataleta cuando no le compraban un libro”, señala Cárcamo.
Marcapáginas está compuesta de muchas secciones entrelazadas. La mayoría de las páginas son viñetas, cómics o historietas creadas por artistas latinos y colaboradores de la revista. También incluye una sección de entrevistas a ilustradores: Sabias qué, una sección informativa y otra divulgativa, una sección sobre historias de perros adoptados y una última que propone actividades plásticas y culinarias para los más pequeños.
La revista busca fomentar la lectura de paso, “la lectura más desechable, la que se ha perdido con el desvanecimiento de las revistas y de los quioscos”. Está diseñada para que el niño que lo lea disfrute, aprenda y la haga suya.
A su presentación, ha acudido Pato Mena, un ilustrador chileno asentado en Barcelona. Autor e ilustrador de varios libros de niños, Mena ha participado en el último número de Marcapáginas y lo hace para “escapar del mundo adulto y volver al refugio de la infancia. Es la búsqueda de honestidad a la hora de contar historias y poner imaginación en el papel”, señala Mena sobre su trabajo.
Hasta ahora, Marcapáginas contaba con los ingresos de publidad, sin embargo, desde el mes de marzo, el Ministerio de las Culturas, las Artes y el Patrimonio ha confiado en la propuesta, y desde entonces se ha pasado de 1.500 ejemplares físicos a 3.000 y un soporte digital, donde, de forma gratuita, se pueden encontrar los 18 números de la revista que ya se han publicado.
EL FUTURO DE LA LECTURA EN CHILE
La presentación, a parte de tener como protagonista la revista, también ha tratado temas sobre la historia de la imprenta en Chile, el estado en el que se encuentra ahora y hacia donde va el mundo de la literatura en el país. De la mano de los dos profesionales, Francisca Cárcamo y Pato Mena, se ha abrió un tiempo de diálogo sobre el rol de las mujeres chilenas en el mundo del libro, la etapa oscura cultural que sufrió Chile después de su golpe de estado y de cómo se está recuperando poco a poco.