Investigadores de la Universitat Politèncnica de Valencia (UPV) y la Universidad Técnica de Dresden (Alemania) han inventado un cojín que ayuda a mejorar la calidad del sueño y evitar los molestos ronquidos. Si lo consiguen, será una gran noticia para quienes roncan, pero más aún para quienes duermen con ellos.
La almohada cuenta con unos sensores que controlan una serie de parámetros de forma muy precisa. Algunos de los datos que valora este invento son el movimiento, la temperatura, la sudoración e incluso la luz que hay en la habitación.
SENSORES INTELIGENTES
Uno de los investigadores de la UPV, Jaime Lloret, ha explicado las bondades del nuevo producto: "Hemos estudiado cuál es la mejor ubicación para cada sensor dentro del cojín. Además, hemos creado el código y los algoritmos necesarios para el correcto funcionamiento del sistema. Todos los datos se envían a través de la red Wifi doméstica a una base de datos médica, con el fin de mejorar el diagnóstico de posibles trastornos".
Los investigadores han asegurado que "el objetivo es conseguir sistemas de bajo coste y cómodos que nos permitan generar alarmas en caso de detectar alteraciones en el ritmo cardiaco, la respiración o la temperatura corporal, entre otras opciones".
RECOPILAR DATOS
El cojín es capaz, incluso, de recopilar datos durante la noche, una funcionalidad muy útil para mejorar la calidad del sueño: "Los datos pueden ser posteriormente analizados por personal médico para tener más información sobre los posibles problemas experimentados durante la noche y poder así realizar un diagnóstico o solicitar más pruebas en el hospital", según han afirmado los responsables del proyecto.