Encontrar dónde vivir en Barcelona puede ser complicado, más aún como estudiante extranjero. Aquellos que rechazan la opción de alquilar habitación y prefieren alquilar un piso, deberán adecuarse al contrato que le permita su documentación.
Las inmobiliarias suelen ofrecer distintos tipos de alquiler, por días, temporal o de tres a cinco años. Para el caso de los estudiantes latinoamericanos, el alquiler temporal es el más conveniente. Los requisitos suelen ser siempre los mismos: acreditar los estudios, presentar una identificación y un respaldo económico, pero no es necesario tener nómina propia.
VENTAJAS DEL ALQUILER TEMPORAL
Las inmobiliarias consultadas coinciden en poner pegas para alquilar un piso a estudiantes, ya que solicitan nóminas y contratos de trabajo como requisito obligatorio. Es por eso por lo que, a los estudiantes --y sobre todo a los extranjeros-- les conviene la opción de elegir un alquiler temporal.
Este modo de arrendar consiste en un contrato que va de los dos a los 11 meses de duración. El modelo contractual tiene una duración similar a la de un curso de máster, por lo que se ahorra pagar meses de más o comprometerse a un contrato que luego no se podrá cumplir.
DESVENTAJAS
La principal desventaja del alquiler temporal son los costes al momento de la entrada. Si bien se paga lo mismo que cuando se ingresa a cualquier piso, al ser un período más corto, al final acaba siendo más caro. En la mayoría de agencias consultadas, para el alquiler temporal se debe pagar dos meses de fianza, una mensualidad más IVA para la inmobiliaria y el mes en curso.
“Si se quiere renovar, se deberán pagar de nuevo todos los gastos”, confirman desde una de las inmobiliarias de alquiler temporal de Barcelona, otra de las desventajas de este tipo de contrato.
REQUISITOS
Las inmobiliarias de Barcelona piden a los estudiantes extranjeros tres requisitos: la carta de matrícula de los estudios que se cursan, el NIE o pasaporte, y las tres últimas nóminas o estados de cuenta de los padres o la nómina propia si la tuviera.
Solicitan también una dirección, por lo general la del interesado en su país de origen. Una vez realizado el contrato de alquiler temporal, se puede presentar en cualquier oficina del Ayuntamiento junto al pasaporte para empadronarse en Barcelona.