Cada vez hay más empresas que ofrecen micro-prestamos. Están en auge debido a nuestra forma excesiva de comprar. Pagando las cosas a plazos parecen menos caras y más fáciles de conseguir. Afterpay es una compañía de tecnología financiera que permite comprar ahora y pagar más tarde sin requerir un crédito tradicional, tarifas por adelantado o intereses. Ahora jóvenes chinos se lanzan de cabeza a Afterpay para así poder llevar un nivel de vida mucho más elevado.
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Según un estudio de la empresa de tecnología financiera Ant Financial, 45 de los 170 millones de chinos millennials (nacidos después del 1990) tienen una cuenta de micro-prestamos. El medio de comunicación South China Morning Post asegura que la mayoría usan micro-prestamos mensuales, para pequeños gastos diarios.
En China el nivel de vida es elevado, por eso varias entidades de crédito han visto un filón en la desesperación de los jóvenes. Han empezado a exigirles que envíen fotos suyas en las que aparezcan desnudos como garantía. Aunque parezca increíble, si los pobres jóvenes no devuelven el dinero a tiempo, las empresas amenazan a la víctima con enviar sus fotos a familiares y amigos. Muchas de estas financieras aplican intereses al préstamo original, así provocan que los clientes se endeuden todavía más y les envíen más fotos y vídeos con las que hacerles chantaje.
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Los ludolai, que es como se conoce en China este tipo macabro de transacciones, tienen un gran poder. En 2016, los prestamistas privados, filtraron diez gigabits de fotos comprometidas de mujeres jóvenes de entre 19 y 23 años, todas ellas aparecían sosteniendo su carné de identidad.
Esta práctica se ha llegado a extender tanto que el año pasado los reguladores financieros de China se comprometieron a eliminar a los prestamistas no autorizados. Aunque pusieron de su parte, según los informes de los medios de comunicación chinos, el problema sigue existiendo.