El lavabo público instalado por el Ayuntamiento de Barcelona en la calle Robadors (Raval) se ha convertido en un lugar impracticable para los usuarios. El sanitario está a años luz de ser un espacio higiénico.
Así lo denuncian los vecinos, que han compartido imágenes en las redes sociales donde queda patente el lamentable estado de estos baños: jeringuillas, heces por los suelos, compresas, cartones mojados, latas de refrescos... Todo un foco de infecciones y suciedad.
'NARCO-WC'
Los últimos en denunciarlo han sido los vecinos de la asociación "Sos Raval", que alertan de algunas de las problemáticas sufridas en el distrito de Ciutat Vella. Otros, directamente, ya lo han bautizado como el "Narco-WC".
Una situación parecida se vive en el barrio Gótico, también en el distrito de Ciutat Vella. La instalación el pasado abril de un lavabo público en la plaza de Medinaceli desató las protestas de los vecinos, que pidieron al ayuntamiento que lo reubicara al paseo de Colom. Sin embargo, la concejal del distrito, Gala Pin, hizo caso omiso de las peticiones de los barceloneses, que sufren a diario las consecuencias de tener un sanitario reutilizado por algunos toxicómanos como narcolavabo.