Unos turistas consiguen retener durante unos minutos a un ladrón que les roba. Los hechos sucedieron este sábado, 24 de septiembre, sobre la 13:30 horas en la calle de Jaume Giralt, en el Born.
En las imágenes, cedidas a Metrópoli, se ve cómo cuatro hombres retienen al autor del robo pasándole el brazo por el cuello. Uno de ellos es un trabajador del restaurante donde los turistas estarían tomándose algo en el momento del atraco. Sin embargo, un compañero del delincuente acude en su auxilio, consigue liberarlo y terminan huyendo. "Sus cómplices lo ayudan", explican quienes captaron la secuencia. "La policía ni apareció".
CONFLICTOS CONTINUOS
Este digital ya se hizo eco a principios de septiembre de la exasperante situación del vecindario de la zona. "Cada noche, estos individuos se pelean con todo tipo de armas que llevan en la cintura, listos para usarlas", explicaba uno de los residentes afectados por los continuos problemas que un grupo de personas genera.
Y no solo de noche: durante el día también es habitual presenciar peleas y agresiones entre grupos de hombres, todos asiduos del parque infantil. El robo de este sábado solo es una muestra más de ello. "Esto es inaguantable", aseguraban los vecinos.
VENTA DE DROGAS
Además de las recurrentes peleas grupales, los mismos residentes apuntaban a Metrópoli que también se produce venta de droga en el parque. "En ambos lados de la plaza, en las calles, venden droga y también salen a robar". Delincuentes que han adoptado el parque como punto de encuentro.
ESCASA PRESENCIA POLICIAL
En cuanto al suceso de este sábado, la Guardia Urbana no tenía constancia de ello. "Hemos llamado a la policía muchas veces", explican los vecinos. Uno de los afectados narra cómo una noche se presentó un coche de los Mossos d'Esquadra en el lugar, "pero con solo dos agentes". "Tenemos la sensación de que tampoco les importa much. A mí, personalmente, me dijeron que eso es lo que tiene vivir allí", expresa indignado el residente.
Sin embargo, la presencia policial no es habitual, tal y como detallan. "Aquí ya no hay presencia policial. Ya ni siquiera vienen a requisarlos".