
Personas caminan por delante los icónicos quioscos de las ramblas
Barcelona completa la retirada de las antiguas pajarerías de la Rambla
El Ayuntamiento pone fin al proceso judicial abierto con los propietarios y avanza en el proceso para la reforma integral del emblemático paseo de la capital catalana
Otras informaciones: Barcelona declara la guerra a los souvenirs subidos de tono: ¿adiós a los imanes de penes?
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El Ayuntamiento de Barcelona finaliza la retirada de las 11 antiguas pajarerías de la Rambla. El consistorio ha dado un nuevo paso en el proceso de transformación integral de este icónico paseo de la capital catalana y cierra un conflicto abierto con los propietarios de los antiguos comercios.
Los servicios municipales iniciaron la desinstalación de las paradas el pasado 10 de febrero y la han finalizado este martes. Los trabajos se han desarrollado de manera progresiva y cuidadosa, utilizando tanto equipos manuales como maquinaria pequeña.

Quioscos en la Rambla en una imagen de archivo
Obras en La Rambla
Las obras han incluido el vaciado de los quioscos y la retirada de los elementos anexos, desmontaje de las estructuras y sus bases y la reparación del suelo del eje central del paseo, a la espera de la urbanización definitiva del tronco central de la Rambla.
El pasado octubre, el Ayuntamiento retiró las siete paradas que se encontraban en desuso, y cuando las obras avancen y afecten al tronco central del paseo, las ocho paradas restantes que siguen en funcionamiento se trasladarán provisionalmente a la plaza de Catalunya, en su parte más cercana a la Rambla.

Acción de protesta de los paradistas de la Rambla contra el cierre de las antiguas pajarerías
Conflicto judicial
Con todo, Barcelona pone punto final a un largo conflicto judicial entre el Ayuntamiento y los antiguos titulares de los quioscos que se remonta a 2009, cuando los tradicionales pajareros, conocidos por vender aves, comenzaron a reconvertir sus negocios en establecimientos de souvenirs y helados, entre otros.
A pesar de que en 2016 se aprobó el Plan Especial de Ordenación de la Rambla, que ya no contemplaba la continuidad de estos quioscos, no fue hasta 2021 cuando el consistorio notificó la extinción de las concesiones, que databan de 1971, lo que dio lugar a varios procesos judiciales por parte de los comerciantes, que finalmente no prosperaron.
En agosto y septiembre de 2024, el Ayuntamiento de Barcelona consiguió recuperar la titularidad de las seis primeras paradas con la correspondiente autorización judicial, mientras que las otras cinco fueron asumidas en septiembre.