El futuro del gran comercio barcelonés, catalán y español está en juego, y el actor que no sepa representar bien su papel en el nuevo escenario del negocio mundial quedará fuera de juego. El Corte Inglés, el grupo de grandes almacenes más grande de Europa y cuarto a nivel mundial, sabe lo que hay y ya está haciendo los deberes. Es lo que ha afirmado, hoy martes, el presidente del consejo de administración de ECI, Dimas Gimeno, en el transcurso de uno de los tradicionales Dinars que organiza la Cambra de Comerç de Barcelona.
“Todos tenemos un gran reto por delante: adaptarnos al nuevo mundo de hacer negocios que nos han traído las nuevas tecnologías”, ha dicho Gimeno. “Y ante este desafío, el gran y el pequeño comercio españoles estamos condenados a entendernos si no queremos que vengan otros y nos saquen del mercado”.
Aunque el comercio online representa actualmente sólo un 4,5% de la facturación minorista en España, su crecimiento a corto plazo disparará la ventaja competitiva de quienes operan principalmente en el mundo digital. Gimeno ha sido muy explícito a la hora de señalar a las nuevas tecnologías como provocadoras de que todo haya cambiado en tan poco tiempo. “Internet, la inmediatez, la exigencia y la rapidez de información han dado lugar a un nuevo marco social y a un nuevo cliente”, ha afirmado Gimeno. “Los cambios tecnológicos también han transformado la sociedad y, con ella, el comercio. Hay una nueva cadena de negocio, y los operadores estamos buscando en todos sus eslabones para seguir siendo competitivos. Y eso, al margen de lo que supone poner al día la logística, el transporte y la distribución”.
Gimeno ha advertido que lo que hay en juego es mucho: el comercio aporta el 12% del PIB español y da empleo a 3 millones de personas -en Catalunya, 16% del PIB y 93.000 establecimientos. “Hay operadoras extranjeras que ya se están posicionando en nuestro mercado y que entran con la ventaja de que no necesitan tener establecimientos físicos de venta”, ha señalado Gimeno, a quien, pese a haber intentado en todo momento no dar nombres propios, al final se le ha escapado el del gigante americano Amazon. “Aquí va a cambiar todo en tres años, y la clave va a ser estar preparados para el envite en la batalla de las plataformas digitales y las tiendas virtuales. Nosotros ya tenemos el 60% de los pedidos digitales a través de smartphone”.
NUEVA LEGISLACIÓN, IMPRESCINDIBLE
En ese nuevo panorama comercial, El Corte Inglés debe saber preservar su condición dominante. En opinión de Gimeno, “hemos de aprovechar lo más nuestro para poder ofrecer al cliente cualquier producto en los dos mercados: la tienda física y la tienda online”. “Llevamos 75 años operando con ellos, así que tenemos una ventaja sustancial en ese sentido si sabemos cómo conservarlo. Y yo apuesto por nosotros”, ha añadido.
Convencido de que, en el terreno estratégico, ECI (la única cadena de tiendas departamentales que queda en España) no tiene por qué temer, Gimeno sí que ha lanzado una voz de alarma en lo concerniente a la legislación imperante ya que, en su opinión, favorece a las empresas que sólo trabajan en el mundo online. “En esta cuarta revolución industrial todo va muy rápido, y las leyes deben adaptarse a esos cambios. Si queremos competir en condiciones, hemos que decirle a las autoridades europeas que hay que encontrar fórmulas para poder competir de igual a igual”, ha pedido Gimeno. “Las administraciones públicas deben garantizarnos competencia legal y leal. No puede ser que nosotros paguemos más impuestos que ellos. Sólo así podrá haber un auténtico 'marketplace' europeo con garantías”.
"Hay empresas del entorno online que no están sujetas a restricciones de horarios comerciales y cuya fiscalidad no se asemeja al marco en que nos movemos las empresas de distribución tradicionales. Necesitamos un marco a nivel europeo que nos permita competir en igualdad de condiciones", ha criticado. "No nos da miedo igualar precios, el problema es que si igualas precios con algunos de estos señores -en referencia a los gigantes del comercio electrónico- estás vendiendo bajo coste y esto no puede ser ".
TURISMO, MÁS Y MEJOR
Otro punto en el que Gimeno ha hecho hincapié ha sido en el de la importancia de seguir atrayendo turismo a Barcelona, en concreto, y a España, en general. Turismo de los países emergentes económicamente y, específicamente, de China. Para ello, ha dado dos datos demoledores:
-El año pasado llegaron a España 484.000 turistas chinos; sólo el Museo del Louvre (París) atrajo a 700.000 chinos.
-El año pasado visitaron Barcelona 350.000 turistas chinos; sólo en unos grandes almacenes de París compraron 500.000 chinos.
“Necesitamos trabajar conjuntamente para conseguir más y mejor turismo”, ha concluido Gimeno a tenor de dichos datos. “O lo hacemos nosotros, o lo harán nuestros competidores”.