“Quería pedir disculpas por lo que hemos vivido abajo”, ha empezado el presidente de Unauto VTC Catalunya, Josep María Goñi, sacudiéndose el confeti de la ropa. La tensión entre los taxistas y los VTC se palpa en el aire. Este jueves, algunos trabajadores del taxi han querido mostrar su rechazo a los empresarios en el marco de la rueda de prensa de Unauto en el Colegio de Periodistas. Por eso el confeti, por eso las disculpas.
El objetivo de la reunión se centraba en contar su versión de la historia. “Asistimos con preocupación al futuro de un colectivo de más de 3.000 conductores”, ha confesado Eduardo Martín, presidente de Unauto VTC a nivel estatal. Y es que la precontratación con una antelación mínima de los servicios que ofrecen los VTC (propuesta por los taxistas) haría desaparecer a este sector, según Unauto.
ELIMINACIÓN DE EMPRESAS Y DESPIDOS
Goñi ha argumentado que los VTC "dejarían de ser competitivos y rentables", lo que en la práctica conllevaría la eliminación de decenas de empresas y el despido de sus trabajadores, según él. "Me parece una verdadera vergüenza", ha declarado Goñi, en referencia a que la Generalitat incluya la precontratación para evitar la huelga indefinida que han advertido los taxistas para el Mobile World Congress (MWC), si el Govern no lo hace. Por su parte, el portavoz de Élite Taxi, Tito Álvarez, ha rebatido su argumento en declaraciones a Metrópoli Abierta: "No perderán sus puestos de trabajo, eso es mentira, lo único que se hará es ordenar".
En este sentido, Unauto ha pedido que el departamento liderado por Damià Calvet reconsidere esta medida, que se podría incluir en el Decreto Ley, y ha criticado que las Administraciones públicas cedan a "la presión y el chantaje" del sector del taxi.
INDEMNIZACIONES PARA LAS VTC
Entonces, según han señalado, si la Generalitat saca adelante esta legislación, tendrá que asumir las indemnizaciones que derivan del Real Decreto Ley aprobado por el Congreso a finales de septiembre, que contempla la expropiación de las licencias actuales de VTC para dejar el sector en el ratio de una licencia por cada 30 de taxis.
Según han calculado los empresarios, la cantidad ascendería a los 1.100 millones de euros en Catalunya, que corresponderían a los 1.945 recursos que se han presentado en esta comunidad y los que prevén que se acaben presentando (unos 4.500). "Si la Generalitat se apresura en regular, se hace responsable de esas indemnizaciones", ha remarcado Martín.
La existencia de aplicaciones como Uber o Cabify se construye sobre el argumento de que “el ciudadano debe tener alternativas para desplazarse”. Así, han valorado que con la precontratación de los servicios el sector del taxi quiere "exterminar" su competencia. De cualquier modo, han querido dejar claro que apuestan por la convivencia de ambos modelos de negocio. “Estamos abiertos al diálogo y no queremos marcar plazos como hace el taxi”, han zanjado con incertidumbre.