El Grupo Zeta ya tiene nuevo propietario después de una larga agonía de 11 años. Prensa Ibérica, el grupo empresarial que lidera Javier Moll, ha cerrado la compra tras lograr un acuerdo con el sindicato bancario con el que el holding liderado por Antonio Asensio Mosbah tenía contraída una deuda cercana a los 90 millones de euros, según informa Crónica Global.
Las entidades financieras, con el Santander y Caixabank a la cabeza, han dado luz verde a la operación después de muchos años de dudas e incertidumbres y solo falta la firma del Institut Català de Finances y de su homólogo valenciano.
Las negociaciones han sido muy complejas. El propietario aspiraba a un beneficio neto próximo a los 15 millones de euros, una cifra que fue rechazada por la banca por la deuda acumulada en el Grupo Zeta.
Prensa Ibérica tiene varias publicaciones. Las más conocidas son La Nueva España (Asturias), El Faro (Vigo), Levante (Valencia) e Información (Alicante). En Catalunya controla el Regió 7 y el Diari de Girona.
JAUME ROURES, EL GRAN PERDEDOR
El gran perdedor de esta operación es el propietario de Mediapro y del diario Público, Jaume Roures, muy próximo políticamente a ERC y Podemos. Sus simpatías ideológicas, próximas al trotskismo, contrastan con su voracidad capitalista por el control de los derechos audiovisuales del fútbol y su amistad con Javier Tebas, presidente de la LFP, que se declara seguidor de Vox.
Jaume Roures, propietario de Mediapro, se ha quedado sin el Grupo Zeta
El gobierno central y la banca siempre se mostraron reacios a la posible compra por parte de Roures, que aspiraba a controlar las dos principales cabeceras del Grupo Zeta, El Periódico de Catalunya y el Sport, por su influencia entre los aficionados del FCBarcelona. Antiguo representante y socio de Johan Cruyff, Roures mantuvo unas relaciones muy estrechas con el expresidente Joan Laporta. En cambio, no tiene una buena sintonía con la actual junta directiva del Barça que preside Josep Maria Bartomeu.