Glovo mueve ficha para expandir su negocio. La compañía dirigida por Oscar Pierre ha comprado la startup barcelonesa Instamaki, una empresa de reparto de comida japonesa a domicilio. La operación, cerrada en firme este martes, ha tenido un coste para Glovo de cinco millones de euros, el precio por el que se ha valorado Instamaki.
Según ha podido saber Metrópoli Abierta, la empresa de Pierre ha llegado a un acuerdo con los fundadores de Instamaki y sus inversores mediante el cual les ofrece acciones de Glovo por valor de cinco millones de euros. Según fuentes cercanas a Glovo, se trata de una estrategia habitual de la marca, habida cuenta de la falta de liquidez y de la valoración en auge de la empresa.
GLOVO FICHA A LOS FUNDADORES DE INSTAMAKI
Con esta operación, Glovo adquiere todas las cocinas de Instamaki: la central, situada en Sant Cugat del Vallès, otra localizada en el distrito barcelonés de Sarrià - St. Gervasi, una en Madrid y una cuarta en Valencia.
La operación también supondrá el fichaje de los dos fundadores de Instamaki, Albert Bonhome y Jan Morell, a las filas de Glovo. Ambos jóvenes liderarán el modelo de cocinas fantasma (dark kitchens) de la startup de Oscar Pierre. El acuerdo se enmarca dentro de la nueva estrategia diseñada por Glovo para aumentar su facturación y margen de beneficio.
INTERÉS EN EL 'KNOW HOW' DE INSTAMAKI
El gigante del delivery apostó hace meses por crear cocinas propias que le permitieran incrementar sus ingresos. Con esta nueva línea de negocio Glovo se saltaba a sus proveedores --los restaurantes-- y pasaba a "llevarse todo el pastel" del reparto de comida a domicilio, explican fuentes internas de la empresa. No obstante, el modelo no les acabó de funcionar, y apostaron por comprar empresas nativas digitales que tuvieran experiencia trabajando con cocinas ciegas.
Se fijaron en Instamaki, empresa que en 2018 facturó un total de dos millones de euros con el reparto a domicilio. La empresa barcelonesa fundada por Albert Bonhome y Jan Morell en 2016 es una de las nativas digitales líderes en comida japonesa a domicilio. A Glovo le interesó el know how de Instamaki, dada su experiencia en las cocinas ciegas.
Previamente, hace aproximadamente medio año, Glovo incorporó a Instamaki en la "carta" de su app como prueba piloto. Desde la compañía de Oscar Pierre comprobaron que Instamaki tenía éxito suficiente, y que eran capaces de mejorar los tiempos de entrega que los restaurantes normales. Así, decidieron apostar firmemente por esta startup barcelonesa.
El modelo de cocinas ciegas permite a Glovo hacer más rentable su negocio. Desde la empresa de Oscar Pierre observan cómo los restuarantes tradicionales de mayor éxito dejan en cola los pedidos de Glovo y retrasan sus tiempos de entrega. En cambio, con la forma de operar de Instamaki, se garantizan entregas rápidas y mayores márgenes de beneficio. Ahí está, según fuentes cercanas, la clave de este movimiento de ficha del gigante del delivery.