Barcelona es un pulmón de moda y creatividad. Ilustres diseñadores han desatado su talento en la ciudad que, año tras año, acoge grandes desfiles reconocidos mundialmente. El estilo vanguardista triunfa en la capital catalana y las grandes tendencias arrasan y se reinventan en sus calles.
Por ello, Sol Pardo, una diseñadora argentina de tan solo 31 años, escogió Barcelona como sede para convertirse en “una referencia mundial”. Su especialidad son los sombreros y ha logrado conquistar a ciudades referentes en el sector como Milán o París desde su pequeño taller ubicado en el barrio de la Vila de Gràcia. Su secreto es ser fiel a la artesanía, la calidad y el lujo para devolverle la significación a un "oficio olvidado", el de la sombrerería.
PARDO HATS
El proyecto se remonta al año 2015 cuando, tras el triunfo de un proyecto universitario en Argentina, Sol empezó su camino como diseñadora. Seis años atrás, la artista no podría imaginar que se convertiría en una emprendedora de éxito. "Me di cuenta de que si quería ser la mejor del mundo en el diseño de sombreros también tenía que ser la mejor empresaria", cuenta la joven.
Las raíces de PARDOhats –el nombre que da vida a la firma– son unas creaciones únicas de Sol que, como estudiante de moda, destacaron en importantes desfiles y le permitieron especializarse en la sombrerería. “Los sombreros son un nicho que desde hace 30 años apenas se explota, era toda una oportunidad”, afirma la creadora. Tras conseguir una beca formativa en la Ciudad Condal, los diseños de Sol –hechos con materiales innovadores en el sector, como la madera– siguieron creciendo y la joven decidió crear su propia firma.
LA FILOSOFÍA ‘SLOW FASHION’
Pardo tenía claro que a través de sus creaciones artísticas quería ofrecer una experiencia lujosa. “Mis sombreros son un lujo en tres direcciones: un lujo económico, un lujo sostenible y un lujo para la marca”, explica. Por ello, el slow fashion define su filosofía y apuesta por “educar al cliente para borrar el concepto de capricho” en el momento de adquirir un complemento. Para la creación de cada accesorio, se invierte una media de 10 a 50 horas de trabajo, y el cliente puede "presenciar todo el proceso".
“No producimos prácticamente stock, tenemos una producción bajo pedido y eso beneficia tanto al planeta como al cliente”, defiende Sol. Según la argentina, es un “privilegio” para sus compradores que sus sombreros “se creen en el momento en que los piden” y le permite ofrecer la opción de personalizar cualquier pieza de su colección y “hacerla única”.
DESAPARICIÓN DEL CONCEPTO DE ‘TIENDA’
La propietaria considera que Barcelona es el lugar idóneo para desarrollar su tienda digital, pero en ningún momento se plantea crear un establecimiento físico de venta en la ciudad. “Ya no creo en el concepto de tienda”, justifica la diseñadora. El verdadero desafío para PARDOHats es “situar al público online en un punto estratégico”.
Su localización, sus campañas y la energía que transmite le han permitido alcanzar la meta y conseguir una audiencia que se identifique con sus creaciones artísticas. Desde boinas y turbantes –que se enmarcan en una línea más fashion– hasta sombrerería profesional, en las colecciones de Sol hay productos que logran conquistar a colectivos de todo el mundo.
“UN PÚBLICO QUE SABE VALORAR”
La artista presume orgullosa de que destaquen “las mujeres seguras de su imagen” entre sus clientes. La mayoría de las compradoras tienen entre 25 y 50 años y “saben valorar las prendas por sus conocimientos en arte, arquitectura y otras disciplinas artísticas".
La firma también dio el salto al mundo influencer y colabora con creadoras de contenido de todo el mundo. “Lo que más me gusta es que cada una de ellas es distinta y le aporta un valor distinto a la marca”, celebra la diseñadora. Según la argentina, cada vez se siente más “cómoda” con las colaboraciones y es consciente de que son un “factor clave” para triunfar en el comercio en línea. De hecho, la reconocida Blanca Miró, con quién comparte amistad y profesión, es "su gran musa" y colabora con ella constantemente.
EL SOMBRERO COMO OBRA DE ARTE
Las innovaciones de pequeños diseñadores como Sol han llegado a grandes cadenas de fast fashion que adaptan las creaciones a su sistema low cost. “Vivimos en una realidad en la que se plagian conceptos de marcas, pero eso también tiene beneficios porque hace más accesible un abanico de productos menos populares en la sociedad”, cuenta Sol.
La emprendedora considera que la expansión de los conceptos artísticos y trabajados en el sector textil –aunque sea bajo unas condiciones totalmente distintas– puede “crear el deseo de buscar la exclusividad” y permite que más gente descubra marcas de lujo como PARDOHats. “Los sombreros son un complemento de gran valor, te lo pones en la cara y termina definiéndote como persona”, explica. Por ello, la artista defiende que todo aquel "que valore los sombreros como obra de arte" acudirá a marcas como la suya.
ESPÍRITU VACACIONAL
Durante el confinamiento, Pardo apostó por “transmitir buenas sensaciones” en sus campañas y consiguió vivir "su mejor momento a nivel económico". Ahora, ante un verano que todavía se aleja de la normalidad, el equipo de Sol ha decidido lanzar una campaña llamada Holidays, que pretende "contagiar la alegría".
La primera colección que lanzará Sol en la nueva temporada es “Ir al sur”, un catálogo con inspiración andaluza. “Queremos mostrar a la sociedad que no importa dónde te vayas de vacaciones, porque si llevas uno de nuestros sombreros sentirás que estás de vacaciones siempre”, concluye la creadora. El mensaje de positividad ante una "situación complicada para muchos" recuerda que PARDOHats nació con un trasfondo social y psicológico muy marcado sin el que la firma de éxito no tendría sentido.