El Índice de Confianza del Sector Comercial (ICSC) de Barcelona alcanzó los 0,7 puntos en 2023, un incremento de 5,7 puntos respecto a 2022 y casi 37 más que el primer semestre de 2020, afectado por la pandemia de coronavirus, según se desprende de un informe municipal.

El Ayuntamiento ha destacado el aumento de confianza de 10 puntos en el comercio cotidiano no sedentario, pero también el incremento de 8,2 puntos en el sector de la automoción, mucho más llamativo teniendo en cuenta los valores de años anteriores.

Por contra, la confianza de los establecimientos dedicados a la venta de menaje y equipamiento personal ha caído en 12,1 y 2,7 puntos respectivamente.

Sector de la automoción

El sector de la automoción barcelonés ha tenido una gran evolución en positivo en 2023, dejando atrás años de valores muy negativos para dar paso a un crecimiento de la confianza que se ha cifrado en 8,2 puntos durante el último semestre del año pasado.

En 2020, se registró un valor negativo de 54 puntos y en 2021 de 24,21, mientras que en 2022 se agravó esta tendencia (-33 puntos). 

Si bien es cierto que la pandemia y la escasez de chips semiconductores ha tenido un impacto global en el sector, la capital catalana ha sumado la particular guerra contra el vehículo privado que mantuvo el gobierno de los comunes, y que no ayudó a revertir la confianza del mundo del motor en Barcelona.