La crisis mundial del sector de los videojuegos llega a Barcelona. La multinacional de origen británico King, propiedad del gigante del sector Activision Blizzard --filial a su vez de Microsoft--, ha anunciado un expediente de regulación de empleo (ERE) por el que pretende despedir de un plumazo el 7% de la plantilla, unos 47 trabajadores.
Así lo ha explicado el sindicato CGT en un comunicado en el que ha mostrado su rechazo por la medida. La empresa anunció su intención de ejecutar los despidos el pasado 12 de septiembre en su filial española, ubicada en la capital catalana.
King, orientada a la creación de videojuegos para móviles, pasó al estrellado con Candy Crush Saga en 2012. Con el expediente, el sindicato acusa a la tecnológica de iniciar una operación de "deslocalización encubierta".
"Deslocalización encubierta"
Y es que, siempre según CGT, la empresa pretende desmantelar varios departamentos de las oficinas de Barcelona para delegar sus funciones en empresas subcontratadas ubicadas en países como la India y otras oficinas del grupo de Europa y EE.UU.
"Resulta incomprensible la necesidad de realizar despidos para reestructurar el grupo Activision Blizzard King, compañías que han aportado 2.000 millones de dólares en ingresos a Microsoft, casi un 30% de los ingresos totales que genera la división de videojuegos del gigante tecnológico, según datos de su informe financiero de 2023", rezan en un comunicado.
Además, argumentan que "Candy Crush Saga habría superado los 20.000 millones de dólares en ingresos desde su lanzamiento en 2012".
Crisis mundial del videojuego
Con la medida, el sindicato apunta a que la crisis mundial del sector de los videojuegos llega finalmente a Barcelona. Los despidos de King se enmarcan dentro de la ronda de extinciones de contratos que ya anunció Microsoft para todo el mundo. En total, calculan que en 2024 el gigante tecnológico se deshará de unos 2.500 trabajadores, siendo unos 1.900 de la división de videojuegos.