La centenaria Patates Fregides Corominas suspende pagos en Badalona
La pérdida de la marca por un pleito familiar desencadena un percance judicial de resultado incierto
Las luchas intestinas de la familia han tumbado la histórica elaboradora de patatas fritas Corominas, de Badalona. La empresa Patates Fregides Corominas presentó concurso de acreedores, que se tramita en el Juzgado Mercantil número 6 de Barcelona. Ahora se abre un periodo de negociaciones con los acreedores, que articulará el administrador concursal.
Futuro precario
Fuentes cercanas a la casa explican a Metrópoli que la voluntad sería superar la insolvencia y continuar las actividades, pero las circunstancias por el momento son poco propicias.
La entidad se encuentra completamente paralizada. Sus dos tiendas de Badalona, sitas en las calles de Santa Maria y Miguel Servet, que estaban en régimen de arrendamiento, bajaron la persiana este verano y ya se han evacuado. La web dejó asimismo de cursar pedidos.
Gestores
La firma pertenece a Joan Corominas Plana y Josep García Ortiz, tercera generación de los pioneros. El primero de ellos se jubiló en agosto último tras alcanzar la edad reglamentaria y ha dejado la gerencia en manos del segundo.
Litigio
El origen del descalabro se debe a dos factores externos y uno interno. Los primeros son los daños ocasionados por la pandemia del coronavirus y los problemas derivados de la guerra de Ucrania. El segundo radica en un pleito entre los citados y su parienta Anaïs Duran Corominas.
La Audiencia Provincial de Barcelona sentenció que la enseña pertenece a esta última.
Con el emblema bajo el brazo, la nueva propietaria y su prole no perdieron el tiempo e inauguraron un establecimiento en calle Dels Arbres. El tubérculo frito que despacha ya no se prepara en Badalona, sino en una planta fabril ubicada en Montcada i Reixac.
Historia casi centenaria
Las raíces de las patatas Corominas son muy antiguas. Se remontan a 1928, cuando el matrimonio Estanislao Sió Vidal y Antònia Ubach Serra, funda un negocio y lo bautiza con el nombre Patatas Sió. Al carecer de descendencia, en los años sesenta ceden el mando a sus sobrinos Joan, Francisco y Pere Corominas Palomeras.
A estos les suceden Joan Corominas Plana, hijo del primero, y Josep García Ortiz, yerno del segundo. Los sucesores constituyen en 1991 la sociedad Patates Fregides Corominas.
Catálogo
La firma elaboraba patatas fritas artesanales, 100% naturales y sin aditivos. El surtido también comprendía otros artículos como “Xoco-Xips”, cortezas de cerdo, ganchitos, ruedas y "barrecha".
El ámbito de distribución se ceñía a Badalona y las zonas circundantes. La compañía facturó en su último año activa 1 millón de euros.