El PP de Catalunya ha puesto a la venta su sede central en Barcelona, que se encuentra en el número 249 de la calle de Comte d'Urgell, cerca de la plaza de Francesc Macià. El local se ofrece por casi dos millones de euros, concretamente 1.967.550. El anuncio se puede consultar en el portal inmobiliario Idealista. Los populares son propietarios de unos bajos con dos plantas que disponen de una superfície construida de 1.009 metros cuadrados.
Fuentes populares consultadas por Metrópoli Abierta han confirmado la intención de vender la sede del PP, pero precisan que la propiedad está en el mercado desde 2015, sin que por el momento se haya encontrado comprador. Sin embargo, es ahora cuando los populares tienen más prisa y están poniendo más esfuerzos en intentar materializar la venta.
Los malos resultados electorales de Xavier García Albiol en los pasados comicios al Parlament de Catalunya, en los que obtuvo únicamente cuatro diputados, han puesto al PP en una delicada situación económica. El PP no tendrá esta legislatura grupo propio en el Parlament, un hecho que junto a la pérdida de siete diputados (en el anterior mandato autonómico tenía 11), comportará que el grupo del exalcalde de Badalona pierda una parte importante de las subvenciones parlamentarias.
Algunas fuentes del PP opinan que los ingresos parlamentarios pueden ser la mitad de los que los populares recibieron la pasada legislatura, que rondó los 1,3 millones anuales. La Mesa del Parlament es quien decide las ayudas a cada grupo en función del número de representantes, y las subvenciones de este mandato todavía no se han decidido a la espera de que se forme el Govern.
14 AÑOS EN EL EDIFICIO
Fuentes populares admiten que la situación económica es delicada. "Hay que ajustar los gastos a los ingresos que tendremos", explica un portavoz. El PP no descarta tener que llevar a cabo otros ajustes para racionalizar el gasto, lo que podría acabar afectando al personal del partido.
Los populares catalanes llevan en esta sede del Eixample barcelonés 14 años, en la que se instalaron tras el traslado de su anterior ubicación, situada en la misma calle de Comte d'Urgell. Fuentes del PP dicen que la prioridad es la venta, pero que no se ha descartado poner los bajos en alquiler si finalmente no se consigue traspasar el local. El precio del alquiler se podría situar en unos 11.000 euros mensuales. Recientemente, la sede del PP acogió la tradicional conferencia de principios de años del líder popular en el Ayuntamiento de Barcelona, Alberto Fernández.
El PP se suma a otros partidos históricos, independentistas y constucionalistas, que se han tenido que desprender de su sede histórica. Los últimos en hacerlo han sido los socialistas catalanes. El PSC ha dejado la sede de la calle de Nicaragua, en Les Corts, y se ha trasladado a la calle de Pallars, en el Poblenou. Con la venta de la sede de Nicaragua, los socialistas obtuvieron unos 10 millones de euros, que servirán para mitigar una parte de la deuda, que ronda los 12 millones de euros. Este domingo tendrá lugar la inauguración oficial de la nueva sede.
Las deudas también motivaron el cambio de sede CiU (ahora PDeCAT), que abandonó el edificio de la calle de Còrsega tras ser embargada y se trasladó en 2016 a otro en Provença con paseo de Sant Joan, por el que los independentistas pagaron 6,4 millones. Un año después de la inauguración, en julio del 2017, el PDeCAT puso también a la venta la sede de Provença, que todavía no se ha materializado. El partido de Carles Puigdemont tiene que afrontar, entre otros importantes gastos, el pago de 6,6 millones por el cobro de comisiones irregulares por el cas Palau.