Las actuaciones policiales de los cuerpos de seguridad españoles no han impedido que los barceloneses voten, aunque, eso sí, se han incautado de papeletas y de urnas en los centros de votación donde han entrado. Los ciudadanos se han desplazado a otros centros para ejercer el voto, aumentando las ya largas colas.
En algunos centros las colas superaban las dos horas a media mañana, pero eso no desanimaba a cientos de personas que se acumulaban en las inmediaciones de los locales donde se podía votar, como se puede comprobar en el siguiente vídeo.
El civismo imperaba en dichos colegios, donde se daba preferencia a las personas mayores o de movilidad reducida para que pudieran votar sin tener que realizar las largas colas. En algunos colegios, además, se ha producido un atasco entre las personas que ya habían votado y las que esperaban, pues debían pasar por una misma puerta por la que sólo pasaba una persona.
En muchos colegios, los cortes de Internet han impedido votar durante largos periodos de tiempo. En esos casos, los organizadores han pedido a los votantes que pusieran sus teléfonos en modo avión, para poder recuperar la conexión lo antes posible.
Todos los votantes van presentando su DNI, que se comprueba en una aplicación, y se anota en una lista.