La huelga general independentista del 8N tuvo poca repercusión laboral pero sí que provocó graves daños colaterales. Las acciones violentas de los piquetes y los grupos de estudiantes, que cortaron vías y tomaron los andenes de la estación de Sants y la de Girona, afectaron a más de 150.000 personas, usuarias de las líneas de Cercanías, regionales, largo recorrido y AVE, según datos aportados hoy por Renfe.
Las líneas de cercanías fueron el servicio más afectado durante la primera parte de la jornada mientras que la víctima al final del día fueron los trenes Alvia y los AVE. El corredor mediterráneo (hacia Valencia y Murcia) fue el menos afectado, gracias a que los manifestantes no cortaron las vías por las que circulan.
TRENES ESPECIALES
El corte de las vías del AVE de la estación de Sants, obligó a suspender el servicio de alta velocidad durante más de cuatro horas y el cierre de la estación desde las 19.00 horas hasta las 22.00 horas también afectó a la red de Cercanías. No obstante, cuando los estudiantes que ocupaban los raíles y los andenes pusieron punto y final a su protesta, la estación de Sants volvió a abrir sus puertas, lo que permitió que se habilitaran trenes especiales durante toda la noche -tanto del AVE (pero solo en dirección sur, no hacia Girona y Francia) como de largo recorrido- para intentar dar salida a los centenares de viajeros que seguían en las dependencias ferroviarias.
Fuentes de Renfe has asegurado que todos los afectados por la suspensión de los servicios tienen derecho a pedir que se les devuelva el importe del billete o que se les cambie por otro igual para otro día si al final se vieron obligados a quedarse y pernoctar en Barcelona.