La comida más importante del día para muchos a menudo la hacemos deprisa y corriendo, prácticamente de pie en la cocina con el abrigo puesto. Por eso son tan especiales esos días en que, sea porque la rutina laboral nos brinda una mañana libre o porque es fin de semana y tenemos que recargar las pilas, podemos desayunar con calma, en algún lugar bonito, en buena compañía y a base de deliciosos platos multicolores. En Barcelona hay numerosos lugares en los que desayunar muy bien en función de lo que nos pida el cuerpo. Estos son algunos:
1- Roast Club Café. El establecimiento es minúsculo, tanto como bueno está el café y deliciosas son sus propuestas gastronómicas, desde unos pasteles caseros ricos, ricos, a otras opciones más sencillas pero igualmente solventes elaboradas con ingredientes de calidad, como sus tostadas con jamón. Roast juega en la liga de los establecimientos de nuevo cuño en el que el camarero –en este caso también propietario y chico para todo, Iker Zago– no es un camarero sino un barista, y donde se respira cultura cafetera por los cuatro costados. Disponen también de zumos naturales, es cool a rabiar y el ambiente, informal y alegre, tiene siempre un aire ligeramente Cheer's. Dos cosas: a/ no echéis azúcar a su fantástico café de especialidad, no necesita (el buen café no es amargo) y b/ igual os encontráis a Miquel Iceta, es su café de referencia. Roast Club Café. València, 143. T. 657.881.466
2- Suís & Bowls. Lleva años en pie en el barrio de Gràcia, donde se ha consolidado como un referente en desayunos y meriendas, y recientemente se ha lavado la cara con un nuevo interiorismo y una carta renovada. Suís & Bowls es más de lo mismo pero un poco mejor, un lugar en el que degustar deliciosos suizos con pastas, pastelería artesana, tostadas con Nutella y, lo más curioso, absolutamente todas las tendencias del mercado. No hay nada que esté de moda que no encontremos aquí: lattes y coloured matchas, carrot cakes, boles nutritivos (vegetarianos y flexiterianos, dulces y salados), zumos frescos, batidos, limonada casera, cafés de especialidad y desayunos como yogur con plátano, fresas, moras, muesli y cereales o el maravilloso yogur griego con almendras, avellanas, manzana, granola, fruta de temporada y sirope de agave. Un must. Suís & Bowls. Travessera de Gràcia, 151. T. 934 153 698
3- Onna Coffee. También en Gràcia, a pocos pasos de la Diagonal, en una callecita peatonal, encontramos esta coqueta cafetería cuyo olorcito nos llama a gritos incluso cuando pasamos por delante. Cafés de especialidad, unos flat whites maravillosos, pasteles caseros, bocadillos y opciones veganas que nos harán olvidar la pastelería convencional. El local es pequeño y luminoso, animado e informal, con un equipo de baristas siempre afanado preparando los mejores cafés para un público sibarita e internacional. Tienen un espacio interior para trabajar o estudiar a cualquier hora del día. Onna Coffee. Santa Teresa, 1. T. 932 694 870
4- Cuba de Janeiro. Este espacio ambientado en la Cuba colonial pero con un aire indiscutiblemente contemporáneo, con su luminoso comedor acristalado con vistas a la Avinguda Mistral, es uno de los secretos mejor guardados de Sant Antoni. Repleto de plantas, con una bonita terraza siempre ambientada y unos desayunos ideales tanto para quienes deseen empezar la mañana con un capricho dulce como para los que prefieran meterse entre pecho y espalda un bagel con salmón. O un pancake con yogur griego y frutos del bosque (nuestro preferido), unos zumos deliciosos muy ricos con mermelada de frutas, hamburguesas, pasteles caseros y otras muchas opciones que nos permitirán disfrutar de eso que entendemos por brunch cualquier día de la semana. Cuba de Janeiro. Avda. Mistral, 33. T. 932 776 641.
5- La desayunería. Nuestro preferido en la materia es, sin duda, este pintoresco lugar cuya inclasificable oferta se ha ganado un hueco en el corazón de los amantes de desayunar a cualquier hora del día. Situado justo enfrente del Mercat de Sant Antoni, su espléndida terraza se encuentra ahora en la flamante superilla recién inaugurada y su carta es un festival de planes de desayuno para todos los gustos. Tostadas, platos combinados, fruta fresca, zumos, pasteles caseros (con una buena oferta para celiacos) y una interminable lista de platazos capaces de levantar el ánimo a cualquiera. Tienen revistas y periódicos, son más majos que las pesetas y la oferta es tal y tan apetitosa que saldremos con ganas de repetir. La desayunería. Comte Borrell, 75. T. 608 341 601.
6- Hidden Cafe. Entre los cafeteros de pro barceloneses existe la creencia casi unánime de que Hidden elabora uno de los mejores cafés, si no el mejor, de la ciudad. Tanto profesionales del sector como aficionados a esta bebida que está reivindicando su lugar comparten mesa en el agradable interior de este establecimiento ubicado a dos pasos de la Diagonal, al lado de L'illa, con sus suelos de mosaico hidráulico, sus mesas altas, su hilazo musical y su oferta de pastelería casera. No hay que perderse su interesante café frío Cold Brewed, ideal para el verano, además de un café de filtro delicioso que nos hará reconciliarnos con esta especialidad. Si además del café y la tostada nos apetece darle al cuerpo una inyección de vitaminas, siempre podemos optar por uno de sus energy bowls. Hidden Cafe. Constança / Déu i Mata. T. 938 538 791
7- Maai. Alguien tenía que inventar el concepto de brunch entre semana, y ese alguien ha sido Viki Valls, propietaria de este restaurante de Gràcia que apuesta por una cocina sana, colorida, en gran parte ecológica, de esas que demuestran que comer saludable no es sinónimo de comer aburrido. A su popular menú de mediodía a 10,50 €, hay que añadir una oferta de desayunos a base de tostadas, bowls con açai, bocadillos, pastelería casera, gofres, tostadas de trigo sarraceno con mantequilla de almendras, plátano y miel y una marcianada deliciosa llamada dónut vegano. Tienen una buena selección de bebidas vegetales y un aire de restaurante vegetariano sin serlo que robará el corazón de los más healthy. Maai. Regàs, 30. T. 938 098 341.
8- La Pubilla. Nos encontramos ante uno de los mejores restaurantes de Gràcia, cuyo menú de mediodía es una joya en su relación calidad-precio (conviene reservar, su solvencia es un secreto a voces). No es el más bonito, ni el más cool, pero es un pedazo de aquella Gràcia tradicional que daba bien de comer una cocina tradicional magistral a un precio inmejorable. Prueba de ello son sus esmorzars de forquilla, que nos permiten huir de los bowls con semillas de chía y los zumos de 5 € y apostar por un desayuno a base de embutidos catalanes o de alguna de sus míticas tortillas. La Pubilla. Plaça de la Llibertat, 23. T. 932 182 994
9- Trópico. El açai –ese voluptuoso fruto de una palmera que crece en estado silvestre en las selvas del norte de Brasil– está de moda en Barcelona. Y probablemente hay que agradecer a la gente de Trópico, un coquetísimo local ubicado en el sur del Raval, cuna del moderneo y los bols multicolores, haberlo dado a conocer entre los foodies barceloneses. Este local de alma brasileña se ha convertido en pocos años en un tótem del desayuno –los fines de semana en forma de brunch–, y no es para menos: huevos Benedict, crêpes típicas del Magreb, pancakes con sirope de arce, frutas tropicales frescas y, la joya de la corona de este local siempre ambientado y cosmopolita, la súper berry amazónica açai, un derroche de color que entra por los ojos, de espíritu healthy e insuperable sabor. Trópico. Marquès de Barberà, 24. T. 93 667 75 52.
10- Mistral. Hemos reservado un lugar para los clásicos en este universo de brunches, desayunos con superalimentos, cafés de especialidad y camareros tatuados con barba. El Forn Mistral (¿aún no conocéis su terracita de la planta de arriba?) es un valor seguro si queremos disfrutar de su gran bollería clásica, quedarnos con cualquier invitado guiri presentándole las mejores ensaimadas de Barcelona y disfrutar del placer de desayunar a la antigua en un lugar de referencia. Aquí no hay pretensiones estéticas pero sí unos minicruasanes de chocolate que se comen de un bocado, ensaimadas con o sin crema, dónuts, unos panes deliciosos y todo tipo de caprichos dulces. En Mistral no pasan los años... Ni falta que hace. Forn Mistral. Marquès de Barberà, 24. T. 93 667 75 52.