La Rambla ha vuelto a llenarse de flores en la 56ª edición de la Festa del Roser, una fiesta que reivindica una de las actividades tradicionales del emblemático paseo y que busca ser un foco de atracción para los barceloneses y los visitantes. La mismta Rambla y las fachadas de los diferentes edificios singulares de su entorno, entre ellos el monumento a Colón, se han decorado este sábado con flores con motivo de la Festa del Roser que organiza cada año la asociación Amics de la Rambla.
Hasta el 11 de octubre, el proyecto "La Rambla en Flor" decora las fachadas de los edificios y espacios más emblemáticos de la Rambla, como el mosaico de Joan Miró. Se trata de una iniciativa que se lleva a cabo con la colaboración de la Escuela de Arte Floral y Paisaje, del gremio de Floristas de Catalunya, y de las entidades, comercios y vecinos del popular paseo barcelonés.
UNA REIVINDICACIÓN FLORAL
Fermín Villar, presidente de Amics de la Rambla, afirmó que “la Festa del Roser es una reivindicación de la flor en la Rambla, un paseo que está pendiente de una reforma, y del que todos decimos que la cultura lo salvará. Con esta Festa queremos defender la flor, una parte natural de la rambla, como lo demuestra el hecho de que el único tramo de la Rambla que tiene nombre de una actividad es la Rambla de Les Flors”.
Algunas personalidades como la regidora del distrito de Ciutat Vella, Gala Pin, y el líder municipal del PSC, Jaume Collboni, han visitado la zona.
Cabe recordar que esta edición llega justo cuando el Gremio está pendiente de un acuerdo con el Ayuntamiento para reducir la tasa por ocupar la vía pública. Si no se soluciona el conflicto, tal como avanzaba este medio, más de 300 floristas podrían cerrar sus establecimientos.