Manuel Valls ha mostrado su apoyo a los gitanos de La Mina y se ha reunido con ellos para analizar los principales problemas que afectan a la comunidad gitana de Barcelona. El candidato a la alcaldía ha conversado con los responsables de la Federación de Asociaciones Gitanas de Cataluña (FAGIC) que le han hecho llegar sus reclamaciones y quejas respecto al trato que reciben por parte de los poderes públicos.
Según Manuel Valls, “los gitanos están muy desilusionados con las políticas de Ada Colau y se sienten menospreciados”, por lo que ha querido escuchar de primera mano cuales son las principales peticiones que desde la comunidad gitana se hace a las administraciones públicas.
COMPROMISO
El candidato, que cuenta con el apoyo de Ciutadans, ha afirmado, tras la conversación con los representantes de la comunidad gitana, que “tenemos que inventar nuevas herramientas para ayudar a la comunidad gitana y debemos comprometernos con las acciones de consejo gitano y sus políticas”.
Manuel Valls ha asegurado, tras la reunión con los líderes de la comunidad gitana de Barcelona, que “el problema de los gitanos es la inacción de los políticos y la falta de ayudas” por parte de las administraciones, una nueva acusación contra las políticas que han desarrollado desde el Ayuntamiento de Barcelona para atender las necesidades de la comunidad gitana de la ciudad.
Una de los objetivos que el candidato a la alcaldía de Barcelona se ha planteado es el de “acabar con la discriminación e implementar la normalización”.
PETICIONES
Los responsables de la FAGIC, a los que Valls ha agradecido su cordial acogida y su apoyo, han pedido al candidato a la alcaldía que se promueva una forma de aumentar la participación de los líderes de la comunidad gitana en los organismos públicos que elaboran normativas pueden afectarles de manera directa.
Además, también se han quejado de lo que consideran sobreactuación de los responsables del Ayuntamiento de Barcelona, que abusan de la gesticulación y la simbología a la hora de referirse a la comunidad, pero cuyas acciones son muy poco efectivas para mejorar la vida de los gitanos. Igualmente han pedido que aumente el diálogo con las instituciones para mejorar la relación entre la sociedad gitana y las administraciones.