LLega el verano, el calor y el buen tiempo, y con él también regresa el mosquito tigre. Barcelona es una de las ciudades afectadas por la plaga de esta especie invasora, proveniente del sudeste asiático. La Agència de Salut Pública de Barcelona (ASPB) ya ha desplegado un programa que controlará mosquitos en 55 "zonas de riesgo" de la capital catalana hasta noviembre, con especial atención sobre el mosquito tigre, aunque también detectará casos importados de arbovirosis, como zika, dengue y chikungunya. Uno de los objetivos es vigilar los puntos de cría, una de las claves a la hora de reducir su presencia en Barcelona.
Este año, la agencia ha incorporado un nuevo proyecto piloto que persigue reducir los focos de cría en la vía pública modificando las bocas de alcantarilla. Se trata de evitar que se acumule agua y se conviertan en focos de mosquitos, algo que ya se ha realizado en una veintena de puntos de la ciudad.
CAMPAÑA DE CONCIENCIACIÓN
En un comunicado, el organismo público ha afirmado que también atenderá incidencias de ciudadanos y hará divulgación y actividades educativas. Las mismas se enmarcan en una campaña que intensifica el seguimiento durante todo el año de la posible llegada de mosquitos invasores (Aedes aegypti). Además, estudia el posible efecto del cambio climático sobre la estacionalidad de mosquitos en la ciudad.
Actualmente, la agencia trabaja con trampas que además de contabilizar los mosquitos que se capturan, permiten identificar la especie gracias a un algoritmo que detecta si es un mosquito tigre. El nuevo sistema de gestión digital en tiempo real de la información recogida permitirá disponer de los datos sin desplazamientos.
CONSEJOS
El responsable del programa de control del mosquito tigre de la ASPB, Tomás Montalvo, ha explicado que la implicación ciudadana es "especialmente vital e importante en el control de los puntos de cría del insecto en entornos residenciales privados", como jardines, terrazas y patios.
Para evitar la cría de mosquitos, ha recomendado no acumular agua en espacios exteriores, vigilar los recipientes y retirarlos o ponerlos boca abajo. Además, en caso de que se detecten puntos de actividad de mosquito en espacios públicos, puede comunicarse a la ASPB, que hará una inspección.