En cuestión de horas, tanto en la fachada de la Generalitat como la del Ayuntamiento se han descolgado los lazos amarillos en favor de la neutralidad política. Así lo habían ordenado el Tribunal Superior de Justicia de Cataluña y la Junta Electoral respectivamente.

En el caso del consistorio barcelonés, éste ha sido descolgado el viernes por la noche después de que el lazo se volviera a colocar por un acuerdo entre los grupos municipales de ERC, BeC y JxCat.

EL PAPEL DE CS

Tras la disolución de las cortes y el inicio del contador hacia las elecciones del 10 de noviembre, Ciudadanos solicitó la retirada del símbolo por incumplir la ley electoral y el principio de neutralidad política.

La respuesta del consistorio fue que este sería descolgado en caso de que así lo demandara la Junta Electoral por lo que, tras la resolución de este viernes, ha sido retirado.

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