La Asociación Española de Abogados Cristianos ha presentado una denuncia ante la Fiscalía de Barcelona contra un espectáculo urbano programado en las Fiestas de La Mercè al considerar que hizo "un estriptis ante menores de edad" y en el que ve un presunto delito de exhibicionismo.
En la denuncia, recogida por Europa Press, la entidad considera que unas actuaciones que se presentaban como "hip-hop, danza contemporánea, acrobacias, danzas urbana" acabaron con la realización de una "exhibición obscena", y ve responsables de los hechos a la compañía de danza, sus integrantes y al Ayuntamiento de Barcelona, por autorizar y contratar la obra.
VÍDEO EN LAS REDES SOCIALES
La asociación afirma que ha tenido conocimiento de la actuación a través de un vídeo en las redes sociales, y que el espectáculo se realizó el 25 de septiembre en el marco del MAC Festival. Una de las personas que difundió el vídeo fue el regidor del PP, Óscar Ramírez.
En un comunicado, la presidenta de la asociación, Polonia Castellanos, ha explicado que se anunció la obra como espectáculo de carácter urbano y recomendado para todas las edades, pero incluyó una desnudez en la que ven un exhibicionismo que, avisa, está penado en el artículo 185 del Código Penal con prisión de seis meses a un año o multa de 12 a 24 meses.
"No descartamos emprender más acciones legales, además de esta, porque no vamos a permitir que el Ayuntamiento de Barcelona perjudique a los niños", ha afirmado Castellanos.
BATALLA DE HIP-HOP
Fuentes municipales han explicado a Europa Press que el número fue fruto de una improvisación: "Lamentamos que alguna persona se haya podido sentir intimidada u ofendida por el final de este espectáculo de danza".
Han detallado que se produjo el martes 24 de septiembre, último día de la Mercè --y no el 25, como aparece en la denuncia-- en una obra de la compañía de danza urbana Iron Skulls Co, fue fundada en Barcelona en 2013 y con amplia trayectoria, y que fue programada por quedar nominada en los Premios Butaca.
QUITARSE LA ROPA
El número denunciado forma parte de un espectáculo que incluía una "batalla" de bailarines de hip-hop improvisada, y en la última de las siete funciones que realizaron, los bailarines se fueron quitando piezas de ropa hasta quedarse solo en los suspensorios.
Han detallado que no se hizo ninguna alusión sexual, y que fue un número improvisado que acabó diferente cada día y que solo acabó en desnudez este último día de funciones.