La Conselleria d'Interior de la Generalitat, que dirige Miquel Buch (JxCAT), ha sido blindada este miércoles por miedo a ser el nuevo blanco de los radicales independentistas. Agentes de los Mossos d'Esquadra y de la Policía Nacional han creado un perímetro de seguridad en los alrededores del edificio gubernamental catalán con una doble línea de vallas, ante la manifestación convocada por los CDR en la calle Marina con la Gran Via de Barcelona.
Los antidisturbios de la Brigada Móvil (Brimo) de los Mossos han colocado vallas de doble altura en la esquina entre la calle Diputació y el Passeig Sant Joan.
CENTRO DE MANDOS
En el edificio de la Conselleria se encuentra el Centro de Coordinación (Cecor), donde mandos de los Mossos, de la Policía Nacional y de la Guardia Civil dirigen los dispositivos policiales ante las manifestaciones.
El martes, las protestas convocadas por los CDR terminaron con disturbios, quemas de contenedores, 250 hogueras y barricadas en las calles de Barcelona y hubo enfrentamientos entre los Mossos y la Policía y grupos de manifestantes.
BUCH, CONTRA LOS VIOLENTOS
Este mismo miércoles, Miquel Buch ha tachado a esos grupos de violentos, ha vaticinado que volverá a haber "brotes de violencia" y ha advertido de que la policía actuará. Por su parte, los manifestantes solicitan en cada movilización la dimisión del conseller de Interior, al que acusan de represor y de ser el responsable de los excesos de los Mossos.
Además, los Mossos han movilizado el camión equipado con un cañón de agua antidisturbios que lanza chorros a presión hasta unos 60 metros de distancia, tiene capacidad para 3.500 litros, y que no se ha utilizado desde que fue adquirido en 1994.