La denominada minoría silenciosa de Cataluña ha llenado las calles de Barcelona. Unas 80.000 personas, según la Guardia Urbana, y 400.000, según Societat Civil Catalana (SCC), se han manifestado este domingo contra el proceso soberanista y a favor de la unidad de España. Por un día, el protagonismo ha recaído en los ciudadanos y los políticos se han mantenido en un segundo plano.
Dos semanas después de la sentencia del Tribunal Supremo contra los líderes del procés y de manifestaciones independentistas contra la resolución, la mayoría con disturbios a su conclusión, la otra Barcelona se ha expresado en la capital catalana. En esta ocasión, los habituales lanzamientos de objetos e insultos contra la Jefatura de la Policía Nacional han sido sustituidos por aplausos y saludos a las fuerzas de seguridad del Estado.
EL METRO, LLENO
A las 11:00 horas, la Guardia Urbana ya había cortado las principales calles de Barcelona. Entre ellas, la confluencia entre el paseo de Gràcia y la avenida Diagonal. Poco a poco, la marea rojigualda (o constitucionalista) descendía hasta Aragó y Gran Via.
Las líneas del metro y los principales accesos ferroviarios al centro de la ciudad se llenaban de personas contrarias al proceso soberanista, ataviadas con banderas catalanas y, sobre todo, españolas. Para todos, el recuerdo del 8 de octubre de 2017 estaba muy presente. Ese día, un millón de personas se concentraron en la capital catalana a favor de la convivencia y la Constitución.
SOCIETAT CIVIL CATALANA
La manifestación, igual que hace dos años, había sido convocada por Societat Civil Catalana. En esta ocasión, bajo el lema 'Por la concordia, por Cataluña: ¡basta!'. PSC, PP y Ciudadanos se han sumado al llamamiento, mientras que Vox no había sido invitado con el objetivo de transmitir un mensaje de centralidad y moderación. Algunos simpatizantes de esta formación de extrema derecha han acudido con banderas verdes del partido, pero la mayoría de los concentrados abogaba por la unidad de las fuerzas constitucionalistas.
“Hemos de estar unidos. La de 2017 fue la primera vez que fui a una manifestación y ese día nos hicimos visibles” , esgrimía María, una octogenaria del Guinardó que lucía una bandera de España en su chaqueta. “Hoy he vuelto porque es importante que escuchen nuestra voz. La mayoría estamos por la continuidad de España, aunque hagamos menos ruido”, añadía.
AMBIENTE FESTIVO
Alberto y Alejandro también han expresado su rechazo al proceso soberanista. “No habrá independencia, ni referéndum, pero es importante que nuestra voz también se oiga”, comentaba el primero. “Hoy es el día de la mayoría silenciosa de Cataluña. Somos catalanes y españoles, y queremos que se respete la legalidad”, añadía el segundo. A su lado, una mujer de unos 40 años añadía: "Lo que hemos vivido los últimos días es muy grave. Necesitamos calma y firmeza. Y que se olviden de que las calles son suyas".
El rojo y el amarillo teñía las calles de Barcelona al grito de “Yo soy español, español, español” o “Puigdemont a prisión”. Minutos antes de las 12:00 horas, el ambiente era ensordecedor y miles de personas coreaban sus proclamas. También se han exhibido múltiples pancartas. "Ni república ni independencia" o "Viva España y visca Catalunya", podía leerse en algunas inscripciones. El hit musical preferido, obviamente, fue el "Viva España" de Manolo Escobar, que sonaba a todo trapo en el paseo de Gràcia.
APLAUSOS A LA POLICÍA
Los manifestantes han vitoreado a Albert Rivera, el líder de Ciudadanos, y a Pablo Casado, presidente del Partido Popular, pero no se han mostrado tan próximos con los dirigentes del PSC. También se han vivido algunos momentos de tensión con los informadores de TV3 y un equipo de la cadena autonómica ha abandonado la manifestación tras ser increpado.
Una multitud de manifestantes, mientras, se acercaba a la Jefatura de la Policía Nacional de Via Laietana para saludar y agradecer a los agentes el trabajo que están realizando estos días. Ha habido intercambio de saludos y aplausos en un ambiente muy distendido.
LOS DE ARTÓS
Al centro de Barcelona también han llegado cientos de jóvenes que se han concentrado en la Plaza Artós, en Sarrià. La semana pasada, se enfrentaron a radicales independentistas. Algunos portaban banderas carlistas y preconstitucionales, y los más radicales acusaban al PSOE de "complicidad con los separatistas". Entre los manifestantes también ha podido verse alguna bandera de la Guardia Civil.
Los parlamentos han empezado pasadas las 13:30 horas. En esta ocasión, los políticos han tenido un papel muy secundario y ha sido el presidente de Societat Civil Catalana, Fernando Sánchez Costa, quien ha cerrado la manifestación. En su discurso, Sánchez Costa ha reclamado la "convocatoria inmediata de elecciones" en Cataluña y ha sentenciado: "Prou procés".