Los vecinos de Barcelona se movilizan contra el amianto. 89 asociaciones de la capital catalana y otras poblaciones de Cataluña y quince entidades han reclamado a la Generalitat y al Ayuntamiento de Barcelona una fecha límite para ejecutar un plan de retirada "responsable" de Cataluña.

En las cartas dirigidas al presidente de la Generalitat, Quim Torra, y a la alcaldesa de Barcelona, Ada Colau, los vecinos y entidades recuerdan los "millones de toneladas, especialmente de fibrocemento, instaladas en toda Cataluña”. Han insistido que su retirada es necesaria para preservar la salud de la población y en el escrito incluyen el lema "Por una Cataluña sin amianto".

CARTAS A COLAU Y TORRA

Este jueves se ha celebrado una rueda de prensa en la cual representantes de la Federación de Asociaciones de Vecinos de Barcelona (FAVB) y de Jubilados de Macosa-Alstom Afectados por el Amianto han comunicado que las cartas se entregarán este jueves mismo a la Generalitat y al Ayuntamiento.

Para combatir esta crisis, la FAVB y los Jubilados de Macosa-Alstom han creado una comisión contra el amianto que informa y asesora a los vecinos sobre las graves consecuencias para la salud que tiene su exposición.

LIBRO BLANCO DEL AMIANTO

Por su parte, Miguel Moreno, miembro de Jubilados de Macosa-Alstom, ha solicitado en la rueda de prensa "el mayor apoyo social" para que Cataluña disponga, lo más pronto posible, del Libro Blanco del Amianto. El objetivo es diseñar las mejores estrategias a corto y medio plazo para erradicar todo el amianto.

La relación de Cataluña con el amianto se remonta a años atrás. Centenares de toneladas fueron fabricadas en Cataluña, especialmente en la antigua empresa Uralita, y también se importaron de fuera. Se llegaron a utilizar en más de 3.000 productos hasta el 2002, cuando se prohibió totalmente.



El fibrocemento se usó mayoritariamente en la construcción, pero también para fabricar pinturas, losetas, proyectados y calorifugados, que han conformado o aún conforman paredes y falsos techos o recubren estructuras metálicas. Actualmente el amianto se encuentra repartido en distintos espacios, como las tuberías, el Metro de Barcelona y en edificios sensibles, entre los cuales figuran escuelas, hospitales o mercados públicos, como el mercado de la Boquería. En ocasiones está a la vista y en otras está oculto.