El Ayuntamiento de Barcelona ha decidido romper el duopolio de las motocicletas compartidas y abrir el negocio a un total de 21 empresas. El consistorio de Ada Colau ha adoptado un sistema de adjudicación de licencias con el que pretende, según los expertos en movilidad, "regular el sector y romper la situación de duopolio", facilitando así la entrada de jóvenes emprendedores en el servicio de motos compartidas de la ciudad.
Con la adjudicación de 6.958 licencias de motos compartidas entre las 21 empresas que se presentaron, se abre, según fuentes próximas al consistorio municipal, "claramente la oportunidad a que pequeños emprendedores locales puedan participar del nuevo servicio de motos compartidas para la ciudad de Barcelona".
EMPRESAS LOCALES
Dichas fuentes indican, además, que la decisión favorece el impulso de empresas nacidas mayoritariamente en Barcelona con la consiguiente generación de puestos de trabajo "bajo un modelo que regula y ordena el sector del motor sharing de forma abierta y participativa".
De esta forma, tal y como resaltan operadores y expertos en movilidad, "se pone fin a una situación de alegalidad que durante cuatro años se había instaurado en Barcelona y rompe la situación de duopolio existente, donde el mercado se concentraba básicamente entre dos grandes operadores, Acciona y Cooltra".
Esta iniciativa de regulación y adjudicación, pionera en España y que integra las iniciativas locales de emprendimiento en el tejido empresarial de la ciudad, se convierte así "en un modelo" para los ayuntamientos de grandes ciudades que aún hoy tienen pendiente "regular un servicio que actualmente se ofrece de forma alegal y que continúa en manos de grandes empresas, dificultando el acceso a nuevos operadores".