El jueves por la tarde fue una jornada complicada para los agentes de seguridad de Barcelona. Mientras una pelea multitudinaria en Sant Joan Despí se saldaba con dos personas en la UCI por heridas de arma blanca, otros se tomaban un descanso en un centro comercial de las afueras de la ciudad.
Como se puede observar en el vídeo, un turista se puso en ropa interior en el interior de la fuente del centro comercial Splau, situado al lado del estadio del Espanyol. Justo esa noche se celebraba el partido de la Europa League entre el equipo catalán y el Wolverhampton Wanderers.
Tras varios segundos, dos agentes de seguridad del establecimiento, alertados por el público, se acercaron hasta el hombre para exigirle que se marchara. Fue entonces, y tras unos cuantos largos, que el turista se levantó y se vistió.
MÚLTIPLES ALTERCADOS
Esa misma noche un grupo de hinchas del equipo inglés se enfrentaron esa misma noche en torno a las 22:30 horas a agentes antidisturbios de la Guardia Urbana en la plaza Reial de Ciutat Vella.
En un vídeo difundido a través de las redes sociales, se ve a decenas de seguidores gritando e insultando a los agentes que avanzan contra los ultras con la porra en la mano, escudo de protección y casco.
“300 HOOLIGANS”
Fuentes municipales señalan que cinco urbanos resultaron heridos leves a causa de lanzamientos de objetos y agresiones después que unos "300 hooligans causaran disturbios en el espacio público". Un hincha fue ingresado en el Hospital del Mar con pronóstico menos grave. En el vídeo se aprecia como los ultras lanzan una barra de hierro a los pies de los agentes. La policía detuvo a uno de los hinchas.